En minoría, con un escenario político plagado de sobresaltos y las difíciles relaciones con Podemos, aprobar los Presupuestos se convierte en un calvario cada año para el Gobierno en general y para el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, en particular.
Los de 2016 se aprobaron el 22 de abril, con 15 votos del PSOE y 2 de Podemos y 16 del PP en contra. 8.240 millones, con los que “se cierra un capítulo negro de la historia de la economía en Castilla-La Mancha y se inicia la senda de la recuperación económica y social de la región”, proclamó Ruiz Molina. Aún no ha sido posible pactar con Podemos las cuentas de 2017.
35 HORAS Y LOS CONFLICTOS CON RAJOY
El déficit se mantiene controlado pero los conflictos con el Estado han sido una constante en la relación de los Gobiernos de España y de Castilla-La Mancha. Cristóbal Montoro recurrió al Tribunal Constitucional la jornada de 35 horas semanales en la Junta y hay pulso en cada anuncio de oferta de empleo público. Más el desencuentro absoluto en la gestión del Tajo por los trasvases. Habrá que ver cómo afecta la llegada de María Dolores de Cospedal al Gobierno a las relaciones con la Junta y el nombramiento de la vicepresidenta, Soraya Saenz de Santamaría, al frente de las relaciones con las autonomías.
GOBERNAR A IZQUIERDA Y A DERECHA
La conflictividad social ha bajado notablemente en esta legislatura con respecto a la vivida en el Gobierno Cospedal, si bien Sanidad y Educación siguen siendo los principales focos de problemas, hasta el punto de que Emiliano García-Page tuvo que hacer en mayo su primera crisis de Gobierno sacando a Reyes Estévez para nombrar a Ángel Felpeto en Educación, Cultura y Deportes.
El presidente, defensor del toreo con las dos manos, asume que la acción de gobierno tiene que mirar a la izquierda, a la derecha y al centro. Así, el presidente y la hoja de ruta del Ejecutivo se plagan de encuentros y gestos con todo tipo de colectivos sociales, sin descuidar el sector empresarial ni el agrario. Page combina en su agenda un acto matutino con la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, y el llamado tercer sector; un acuerdo vespertino contra los desahucios con la titular de Fomento, Elena de la Cruz; y por la noche una cena con los grandes empresarios de CLM junto al vicepresidente, José Luis Martínez Guijarro; y los consejeros de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco; Hacienda, Ruiz Molina; y Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural. Francisco Martínez Arroyo.
EL SECTOR SOCIAL, EN LA AGENDA
En el área social se han dado pasos como la negociación de leyes para convertir en derechos los avances en discapacidad, unas 4.000 familias reciben ayudas contra la pobreza energética, ha subido el Ingreso Mínimo de Solidaridad, se ha creado la Mesa de Envejecimiento Activo y se ha incrementado la cobertura de la teleasistencia. El atasco en los expedientes de la Dependencia siguen siendo el caballo de batalla, con fuertes enfrentamientos entre el Ejecutivo y la Plataforma de la Dependencia. CLM reclama al Estado 353 millones de deuda en dependencia.
EL ESCUDO DE NACHO HERNANDO
En Comunicación, el portavoz, Nacho Hernando, se emplea a fondo como escudero de Page y de sus compañeros de Ejecutivo y todos siguen el modelo clásico de dejar al presidente los grandes anuncios de la acción de gobierno. En la calle, las instrucciones permanecen claras: hablar y tratar con todo el mundo.
“FRENADA LA HEMORRAGIA”
Año y medio después de llegar al Gobierno, Page da por cortada la hemorragia económico, social e institucional de la que acusó a Cospedal. Así lo defendió en el Debate del Estado de la Región, apoyado en datos como la creación de 86 empleos más al día o 600.000 euros más en sanidad.
Un año perdido para el PP y 12 meses con muchos anuncios y pocos hechos para Podemos.