Hacía mucho tiempo que la Ejecutiva Regional del PSOE no salía de casa, algo que, por lo demás, había ocurrido en muy pocas ocasiones. Pero el lunes 9 de abril, los socialistas de Castilla-La Mancha pusieron rumbo a la provincia donde habían perdido las elecciones hace poco menos de un año para apoyar a su nuevo líder territorial allí, Pablo Bellido, y a hablar de agua en el corazón de los pueblos ribereños del trasvase Tajo-Segura y sus pantanos de cabecera. El gesto con Guadalajara, el lugar donde nadie del PSOE quería ir, y el especial tratamiento que el congreso provincial tuvo para Emiliano García-Page y Jesús Fernández Vaquero, hacen que Bellido no sea considerado uno más en el escenario de la renovación socialista en la región. Él se deja querer y bromea con la pregunta ¿es usted el «niño mimado» de Page? La respuesta está en las próximas líneas y también en la entrevista completa que publicamos en portada.
Dirige la agrupación provincial del PSOE que menos cosecha aportó en las elecciones de 2011. De hecho, las perdieron en Guadalajara. ¿Mérito de Cospedal y Antonio Román, demérito de Barreda y el PSOE o hay una tercera razón?
Lo que no hay es una única explicación, sino probablemente la suma de todo. A una parte de Guadalajara, la más dinámica y la que tiene más población, le afecta más la política nacional que a otras provincias, que tienen más claves provinciales y regionales; y, evidentemente, algunas cosas hemos hecho nosotros mal. Me niego a pensar que la culpa siempre es de otros. Evidentemente la crisis económica ha afectado muchísimo, pero hay otras causas que tenemos que detectar. Y el PP ha debido hacer cosas bien cuando ha obtenido la confianza de la mayoría. Si no somos autocríticos y no reconocemos evidencias de este tipo, tendremos dificultades para elaborar un discurso convincente a futuro.
Y usted, para ganar en Azuqueca, ¿qué hizo mejor que sus compañeros y sus jefes, que perdieron?
Azuqueca es una población donde la situación nacional afecta aún más que al conjunto de la provincia, pero lo que hicimos fue localizar mucho las elecciones, intentamos llegar a la ciudadanía y evitamos un voto de castigo. En cualquier caso, yo no me atribuyo ningún gran mérito, teníamos un equipo extraordinario, habíamos hecho una gran gestión, la nueva candidatura era muy joven, muy fresca, con un discurso muy potente y conseguimos llegar a la ciudadanía.
“EN GUADALAJARA DEBERÍAMOS HABER OBTENIDO UN RESULTADO UN POCO MEJOR”
¿Qué ha hecho Barreda mal, para perder las elecciones?
En primer lugar, tenemos que reconocer que el elemento central de las elecciones autonómicas de mayo de 2011, que recorrió todo el país, y en todas las comunidades autónomas donde hubo elecciones el PP fue más votado que el PSOE, en todas. No es una exculpación…
¿Y es la única explicación?
No, no puede serlo. Pero sería muy injusto no tener en cuenta que eso sucedió en Madrid, en Valencia o en Asturias y Baleares, donde gobernábamos. En Castilla-La Mancha es donde menos diferencia hubo, eso también es justo tenerlo en cuenta. ¿Eso significa que todo tuvo que ver con cuestiones nacionales? No, pero mucho sí; es una evidencia. También hay razones que tienen que ver con cuestiones regionales, provinciales y locales. En Guadalajara deberíamos haber obtenido un resultado un poco mejor y creo que hemos tenido un déficit de comunicación en algunos asuntos. ¿Por qué? Porque no parece muy razonable que en una provincia que en esos cuatro años recibió de la Junta la mayor inversión de la historia…
¿De quién es la culpa del fallo de comunicación? ¿Del Gobierno o del partido?
Yo no quiero decir de quién es más la culpa, la culpa es de todos y el mérito del PP que consiguió colocar una cosa que no era cierta en el imaginario colectivo. Guadalajara había sido un provincia muy bien tratada los últimos cuatro años y, sin embargo, había un cierto complejo de que era al revés. Hay otras razones, es una mezcla de asuntos, como la población que ha llegado de la Comunidad de Madrid…
“ESTUPENDO QUE NOS TENGAN UN POCO DE ENVIDIA”
La primera salida de la Ejecutiva Regional ha sido a Guadalajara y la dirección regional se empleó a fondo en su congreso provincial. ¿Es usted el “niño mimado” de Page?
Ja, ja, ja… Me encanta que se piense eso. Estupendo que nos tengan un poco de envidia.
¿Es consciente de la expectación que ha despertado en su partido, donde hasta ahora se miraba a Guadalajara como los responsables de la derrota?
Sí. Soy consciente de que a Emiliano le importa mucho Guadalajara y a mí me ha dicho que a él le encanta. Él está centrado en toda la región, va a moverse por toda Castilla-La Mancha, pero muy particularmente en Guadalajara. Es verdad que nuestra relación es muy buena, solo tengo palabras de agradecimiento a Emiliano García-Page y yo creo que este trato de favor es absolutamente lógico, en Guadalajara no tuvimos buenos resultados, tenemos que preocuparnos por toda la región, pero especialmente por donde menos hemos funcionado bien.
«EN TODO MOMENTO SE DETECTÓ LO QUE PODÍA PASAR EN GUADALAJARA»
¿Es cierto que estaban abandonados por el partido en Castilla-La Mancha en los últimos tiempos?
No lo creo. Yo fui parte de la Ejecutiva Regional anterior, se le dio importancia a la provincia y el PSOE de Guadalajara hizo un gran esfuerzo. Es verdad que no obtuvo los resultados esperados, pero debemos evitar hacer juicios de valor a posteriori despreciando el contexto. El Gobierno regional sí estuvo pensando en Guadalajara y en todo momento se detectó que era una provincia en la que podía pasar lo que sucedió.
Pero no se pusieron los remedios.
Se pusieron los remedios que entonces se consideraron y no fueron suficientes, sencillamente. No me cabe ninguna duda de que si las elecciones autonómicas en Castilla-La Mancha hubiesen coincidido con las andaluzas o las asturianas, hubiese ganado el PSOE, no el PP y particularmente en Guadalajara el resultado del PSOE hubiese sido significativamente mejor. Pero fueron cuando fueron, los temas nacionales tuvieron una incidencia importante, algunos temas regionales que pudimos hacer mejor, algunos temas provinciales que debimos hacer mejor, lo reconocemos, lo analizamos y ahora intentamos hacer un trabajo útil desde donde estamos, que es en la oposición y los ciudadanos quieren que hagamos una oposición útil, constructiva, realista y seria. Y eso es lo que vamos a hacer.