El exalcalde de Alcázar de San Juan, José Fernando Sánchez Bódalo, ha asegurado que durante su declaración de hoy como imputado en el juzgado de instrucción número 2 de Alcázar de San Juan por su gestión al frente de la empresa municipal Aguas de Alcázar ha contestando a la jueza «intentado poner verdad sobre mentira».
El exalcalde socialista ha asegurado a Efe que «ha quedado demostrado que no ha habido en ningún momento desviación de dinero público para fines privados, que tampoco se han realizado obras para particulares y que todo lo que ha tenido que cobrar Aguas de Alcázar lo ha cobrado o lo ha intentado cobrar, aunque en algunos casos no haya podido hacerlo».
José Fernando Sánchez Bódalo ha estado unas cinco horas declarando ante la jueza como imputado por la querella que presentó contra él el actual equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alcázar de San Juan por un presunto delito de prevaricación, tráfico de influencias y malversación de fondos cuando presidía la empresa Aguas de Alcázar.
Sobre la deuda que tenía Aguas de Alcázar cuando abandonó la empresa, que el actual Equipo de Gobierno cifra en unos 8 millones de euros, Sánchez Bódalo ha afirmado que en la denuncia inicial «no había nada» sobre este tema y que «lo han incorporado para justificar la venta».
En este contexto, el exalcalde ha lamentado que el Partido Popular y Ciudadanos por Alcázar «no hayan tenido ningún problema en acusar a todo el mundo» para «montar una acusación que no tiene pies ni cabeza».
«Es una querella montada por el Equipo de Gobierno con 4 ó 5 despachos de abogados, alguna empresa más y con muchos cientos de miles de euros de los contribuyentes alcazareños», ha concluido.