El portavoz del grupo parlamentario popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Cañizares, ha denunciado hoy que los presupuestos de la región para 2016 «nacen con un agujero de 1.000 millones de euros que ha creado el gobierno de Emiliano García-Page en solo seis meses».
Para Cañizares, este es el resultado de la «nefasta» gestión del PSOE y Podemos en el gobierno de Castilla-La Mancha, que está «consiguiendo acabar con todo lo que se había conseguido en los últimos cuatro años con el gobierno del PP, presidido por María Dolores Cospedal, y el esfuerzo de todos los castellanomanchegos», ha afirmado el portavoz popular en un comunicado.
A su juicio, son unos presupuestos en los que «se incumplen todas las promesas y compromisos del bipartito de PSOE y Podemos y, por tanto, no incluyen los 600 millones de euros del tan anunciado rescate ciudadano».
En este sentido, el parlamentario regional ha apuntado que «donde sí se van a tener que dedicar 600 millones de euros es al incumplimiento del déficit que se ha producido en Castilla-La Mancha en los pocos meses que lleva Page al frente del gobierno regional».
«Una situación que se ve agravada cuando tenemos en cuenta que se necesitan 100 millones de euros para evitar las derivaciones de la sanidad pública a la privada», ha explicado Cañizares, quien ha denunciado que estas derivaciones se están produciendo «de manera masiva en Castilla-La Mancha con el gobierno de Page y Podemos».
Asimismo, Cañizares ha recordado que el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha remitido esta semana una carta al Gobierno regional instando al Ejecutivo autonómico a aprobar un acuerdo de «no disponibilidad» de crédito y dar cuenta mensualmente del control del gasto debido al incumplimiento del déficit.
Por otro lado, Cañizares ha lamentado que en Castilla-La Mancha «la economía va mal», como demuestran las malas previsiones de crecimiento para la región, con una previsión del 2,6 por 100 de crecimiento del PIB para 2016, frente al crecimiento del 3,2 por 100 que se produjo en 2015 con el gobierno del PP y con Cospedal como presidenta.
Por su parte, la diputada regional del PP Lola Merino ha acusado al presidente regional de «abandonar a los enfermos mentales y a sus familias» ya que «ha rechazado una enmienda del PP para terminar las obras de la residencia comunitaria para enfermos mentales de Alcázar de San Juan».
En un comunicado de prensa, ha señalado que el gobierno regional «está ignorando las reivindicaciones de las asociaciones, de los más de 23.000 enfermos mentales de la zona de La Mancha y de sus familiares, a los que pide tranquilidad y confianza en unas promesas que, como ya han demostrado, tienen credibilidad cero».
Además, Merino ha indicado que «el presupuesto del gobierno regional para salud mental ha bajado un 2 por 100 respecto al año anterior, con lo que queda demostrado que las políticas sociales y la atención a enfermos mentales no son una prioridad para la Junta».