Los Gobiernos de Castilla-La Mancha y Aragón han suscrito un convenio sanitario que beneficiará a más de 2.200 personas de la comarca de Molina de Aragón (Guadalajara), que ya no tendrán que desplazarse hasta 100 kilómetros para recibir asistencia hospitalaria.
La presidenta castellanomanchega, María Dolores de Cospedal, ha presidido el acto de rúbrica del convenio entre el consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, y su homólogo aragonés, Ricardo Oliván, y que se produce después de que el texto haya sido ratificado en los parlamentos autonómicos de ambas regiones.
En virtud de este convenio, los vecinos de 26 municipios de la comarca guadalajareña de Molina de Aragón podrán ser atendidos en los hospitales de Teruel y de Calatayud y en el caso de patologías que lo requirieran también podrán acudir al de Zaragoza.
El objetivo del acuerdo es, tal y como ha resaltado Cospedal, «dar una solución definitiva a lo que antes generaba problemas», ya que convierte en «realidad y obligación jurídica» lo que antes era un «hábito y costumbre» entre profesionales sanitarios de ambas comunidades.
La presidenta regional, que ha sido recibida por un grupo de personas que lucían pancartas con lemas como «Cospedal nos quita del mapa» o «Menos protocolo y más servicios», ha destacado que el convenio rubricado refleja el «compromiso fuerte y decidido con la defensa de la sanidad pública para todos, sin condiciones».
Cospedal ha asegurado que este convenio es «un gran paso para la mejora de los cuidados de la salud de los ciudadanos» que se suscribe por un «convencimiento político y social para mejorar cualitativa y cuantitativamente el servicio sanitario».
En este sentido, ha dicho que por encima de las administraciones y los límites territoriales están los pacientes y, para ello, deben trabajar las comunidades autónomas con armonía y cohesión.
«Hemos demostrado que sabemos conjugar los intereses de ambas comunidades y que los intereses que más importan son los de los ciudadanos», ha resaltado.
Asimismo, ha señalado que para garantizar un servicio público de salud «tenemos que afinar en la gestión y hacer un gasto eficaz» y ha recordado que el Gobierno que preside ha pagado 2.000 millones de euros las facturas que el anterior Gobierno socialista dejó sin pagar.
Cospedal ha apuntado que espera volver a Molina de Aragón a lo largo de este primer trimestre del año para presentar el proyecto del Parador de Turismo.
Por su parte, José Ignacio Echániz ha destacado la importancia de este convenio «tras un año de trabajo conjunto» y ha afirmado que ha sido «una prioridad» para el Gobierno de Castilla-La Mancha.
Echániz ha subrayado el diálogo y la colaboración entre ambas comunidades autónomas y ha señalado que «con políticas rigurosas y responsables se consiguen romper barreras y hacer sencillo lo que no lo era».
Asimismo, su homólogo aragonés ha resaltado que dicho convenio permite poner al servicio de los ciudadanos «más recursos sanitarios más próximos», lo que mejora cualitativa y cuantitativamente la atención sanitaria.