El portavoz de Comuns en el Parlamento catalán, David Cid, ha recriminado al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que critique el acuerdo de financiación singular para Cataluña y no hable de la «fiscalidad de Madrid», que es lo que «masacra» a su comunidad autónoma.
Así lo ha afirmado en declaraciones a EFE, en las que ha justificado la necesidad de una financiación específica para Cataluña, porque dispone de competencias que no tienen otras comunidades, y ha deplorado la reacción de Page al acuerdo entre PSC y ERC que permitió la investidura de Salvador Illa.
«Lo que está masacrando a Castilla-La Mancha es la fiscalidad de Madrid»
«Page habla mucho de Cataluña. Me sorprende que no hable nunca de Madrid. Básicamente, lo que está masacrando a Castilla-La Mancha es la fiscalidad de Madrid», ha denunciado.
Según Cid, el gobierno de Isabel Díaz Ayuso «aprovecha la capitalidad de Madrid para drenar de recursos no solo a Cataluña, que mantiene el mismo nivel de PIB, constante».
«El aumento del PIB de la Comunidad de Madrid se ha sustentado sobre la España vaciada»
«El aumento del PIB de la Comunidad de Madrid se ha sustentado sobre la España vaciada», ha apostillado el portavoz parlamentario de los comunes.
A su juicio, no es admisible que haya comunidades que «jueguen al ‘dumping fiscal’ para convertirse en paraísos fiscales, como Madrid, y que luego exijan al Gobierno del Estado o a otras comunidades que compensen esta fiscalidad a la baja» para financiar sus servicios.
Por tanto, «si se quiere avanzar realmente en la igualdad, lo que hay que hacer es acabar con estos paraísos fiscales, como es el caso de la Comunidad de Madrid», ha advertido.
Cid ha defendido un sistema de financiación propio para Cataluña para dar respuesta a un «autogobierno singular» reconocido en el Estatut y avalado por el Tribunal Constitucional, con competencias como «los Mossos d’Esquadra como policía integral, algo que no tienen otras comunidades autónomas».
Un modelo «extrapolable» a otras comunidades
Según Cid, el modelo que recoge el acuerdo PSC-ERC «es extrapolable» a otras comunidades, ya que «prevé que una parte del sistema se nutra de más recursos del Estado».
La solidaridad prevista en el acuerdo, ha remarcado, «solo fija un límite, que es tener igual esfuerzo fiscal, ya que lo que no tiene sentido es que aquí mantengamos el impuesto de patrimonio o el de sucesiones, o un IRPF más alto para las rentas más altas, y otras comunidades como Andalucía, País Valenciano o Madrid hayan eliminado el de sucesiones, por ejemplo, que es muy redistributivo».
En su opinión, tendría que haber una «alianza» de las comunidades para pedir al Estado «más recursos para gestionar» los servicios sociales que les corresponden.