«Son los grandes políticos los que han resuelto las situaciones difíciles». Con estas palabras la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha reclamado el papel de la política y los políticos frene a los «tecnócratas», profesionales que «nos tienen que ayudar».
En un desayuno informativo organizado por el diario «La Razón», Cospedal se mostró partidaria de «la política con mayúscula» y alertó contra los nacionalismos separatistas. «En este barco nos tenemos que salvar todos, porque el que quiera navegar por libre, casi con toda seguridad, va a naufragar», dijo la presidenta, tras defender las políticas de recorte del Gobierno de España y del de Castilla-La Mancha para superar el déficit y volver a crear empleo.
Sobre estas medidas dijo ser consciente de que «es un trabajo muy ingrato, muy duro y muy poco popular, pero es un trabajo que hay que hacer, porque creo que los ciudadanos acaban reconociéndolo», aunque «algunos digan: os jugáis las próximas elecciones, ¡qué le vamos a hacer!».
Lograr eficacia para Cospedal no es cuestión de devolver competencias de las comunidades autónomas al Estado. «Devolviendo competencias no se resuelven los problemas, sino cuando tengamos todos la misma línea (con el défciti), que no podremos cruzar y seamos conscientes de lo que tenemos que hacer y lo que no».
Sin embargo, la presidenta de CLM sí se mostró partidaria de «eliminar toda la Administración paralela» al Estado y de acabar «con las duplicidades», como que haya 17 defensores del pueblo o 17 consejos económicos y sociales, además de los que tienen encomendadas esas funciones en el Estado.
Estuvieron presentes en el desayuno con Cospedal el ministro del Interior, Jorge Fernández; el presidente del Senado, Pío García Escudero; la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes; la alcaldesa de Madrid, Ana Botella; los vicesecretarios generales del PP Esteban González Pons y Carlos Floriano, el Gobierno de CLM al completo y numerosos representantes económicos y financieros de España y de Castilla-La Mancha.