El consejero de Presidencia y Administraciones Públicas, Leandro Esteban, confía en que sean «suficientes» las medidas de ajuste que ha adoptado el Gobierno regional, algunas de ellas «duras», y pide disculpas si en algún caso no se ha tenido suficiente sensibilidad ante algún problema.
Esteban, en una entrevista con la Agencia Efe, deja claro que el objetivo de sanear las cuentas «es irrenunciable» e implica «hacer lo que haya que hacer», pues es la forma de salvaguardar los servicios sociales en el futuro, una «línea roja» que no se puede atravesar, que es «sagrada».
El consejero niega que las medidas adoptadas hasta ahora estén asfixiando la economía regional -«todo lo contrario», afirma-, pero reconoce que muchas de ellas son «duras» y no han sido fáciles de adoptar, por lo que se esfuerza en recalcar que no responden a un «capricho» ni a «un objetivo numérico».
Todos los esfuerzos se hacen porque «hay que cumplir», insiste el consejero, quien argumenta: «si queremos dejar a nuestros hijos algo parecido» al actual sistema de servicios sociales, «el esfuerzo hay que hacerlo hoy, no podemos dejarlo para mañana».
Esteban dice ser consciente de que hay «muchos» ciudadanos que lo están pasando mal y subraya que el Gobierno no se ha alejado de la calle, sino que está tomando las decisiones que considera oportunas para garantizar el futuro, no para asegurarse la victoria en las próximas elecciones.
«Yo creo que todos lo pasamos mal como sociedad y algunos de manera individual; yo entiendo a los ciudadanos que tienen problemas, lo entiendo. Y les pido disculpas en la medida que podamos haber no llegado a atender una situación puntual o que podamos no haber tenido una sensibilidad concreta ante un problema, pero estamos intentando desde el primer minuto estar exactamente en la calle, en el lugar donde siempre hemos estado, en contacto con los ciudadanos», declara el consejero.
Asimismo, se muestra convencido de que hay una «conciencia general» de que toca «arrimar el hombro» y «la inmensa mayoría de la gente está dispuesta a asumir sacrificios de manera individual, y lo hace».
Por ello, se queja de haya «mucha gente interesada en incendiar la calle para que esté molesta con el Gobierno» y pide que aquellos que «ven en la tensión un modo de ganar las elecciones, piensen que la tensión afecta a los ciudadanos».
A su juicio, hay «muchas organizaciones y algún partido político» empeñados en «incendiar la calle», pero eso no resuelve los problemas.
Y rebate críticas concretas del PSOE y los sindicatos de clase sobre los supuestos efectos nocivos de la política del PP sobre la educación y la sanidad.
Esteban sostiene que el Gobierno anterior promovió un modelo educativo deficiente, con las tasas de fracaso escolar más altas de Europa, al tiempo que pretendía «lavar conciencias» gastando mucho dinero en Educación.
«Es absurdo: somos los peores y además los que más gastamos», resume el dirigente de la Junta, quien insiste que «hay un problema de modelo» y el PP está convencido de que, tanto en Educación como en Sanidad, «se pueden hacer muchas cosas utilizando fórmulas distintas y empleando menos dinero».
En ese contexto, argumenta que el Gobierno debe gastar lo que sea necesario, pero con la mayor cantidad de éxitos posibles en la prestación de servicios básicos.
Y niega que, por ejemplo, se vayan a cerrar escuelas rurales, o que las urgencias en los pueblos vayan a dejar de estar atendidas por el cierre de algunos puntos de urgencia.
Esteban defiende que lo que se hace ahora es utilizar los recursos de manera adecuada, «en función de las necesidades reales».
Y añade que «a alguien se le debería caer la cara de vergüenza por haber sido el Gobierno que más gastó y más fracasó».