El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Manuel González Ramos, que ha aseverado que «por primera vez» el actual Ejecutivo ha cambiado el paradigma de la gestión del agua y su discurso «entra bien en cualquier territorio», ha incidido en la necesidad de saber dónde van destinados los recursos hídricos porque «no puede haber un destino fraudulento en su gestión».

«Ante una concesión administrativa como es la del derecho a usar el agua, que es un bien público por excelencia, el Estado debe saber a dónde va destinado», ha insistido González en una entrevista con Europa Press, en la que ha defendido que el PSOE, ahora en el Gobierno, está aplicando lo que llevaba tiempo trabajando.

En este sentido, se ha congratulado de que el discurso que en materia de agua mantiene el Ejecutivo central, «y que hace nada parecía utópico, se puede llevar a cabo», de tal modo que pueda ofrecer la misma posición «en Castilla-La Mancha, Valencia o Murcia». Si bien es cierto que esta entrevista se realizó antes de que se conociera que para el mes de noviembre se va a aprobar una nueva transferencia de 38 hectómetros cúbicos del Tajo al Segura.

«Lo que pasa es que tenemos un cortoplacismo en los temas del trasvase que nos perjudica a todos», ha lamentado el delegado, en referencia a las críticas de los regantes por el último trasvase de 7,5 hectómetros cúbicos destinado a consumo humano.

«No están satisfechos con nada. ¿Falta agua con lo que ha llovido?, ¿Cómo están los embalses de Albacete y Murcia?», se ha preguntado el delegado, que ha lamentado que se «haya perdido el sentido común» como, a su juicio, demuestra el hecho de que por un trasvase de 7,5 hectómetros «nos pongamos nerviosos y nos sirva para enfrentarnos dialéctica y políticamente unos y otros».

Y es que el representante del Gobierno central en Castilla-La Mancha se ha referido a la intención del Ministerio de aumentar la producción de agua desalada, recursos, se ha mostrado convencido, que terminarán destinándose al regadío y que garantizan que gran parte de la población del arco mediterráneo, independientemente de que llueva o no llueva, vaya a tener suministro «y deje de mirar a la cabecera del Tajo para ver si ha llovido».

Dicho esto, y con el aumento de la producción de las desaladoras, el delegado del Gobierno cree que se va a liberar al trasvase Tajo-Segura y esto repercutirá en Castilla-La Mancha y en quien necesite agua, «prioritariamente para beber, para el Tajo o para la agricultura, si hiciese falta, porque da mucho de sí».

Por último, luego de mostrar su satisfacción por el hecho de que los ribereños tengan presencia por vez primera en la Comisión Técnica de Explotación del Trasvase Tajo-Segura, el representante de Ejecutivo central en la región ha ratificado que tanto en materia hídrica como en otras cuestiones que atañen a Castilla-La Mancha «va de la mano» con el Ejecutivo autonómico.

Espera que el auge de Vox sirva de adrenalina para agitar a un electorado de izquierdas que frene su alza

El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha se ha mostrado confiado en que la irrupción de Vox en el Parlamento andaluz, lejos de «anestesiar», suponga un «plus de adrenalina» para movilizar al electorado de izquierdas de cara a los próximos comicios. De igual modo, ha incidido en la necesidad de «descubrir completamente a Vox, porque es la ultraderecha».

En una entrevista en Europa Press, el representante del Ejecutivo central en la región ha considerado que los resultados cosechados por la formación que lidera Santiago Abascal «ha removido los cimientos de un Estado, como el español, que ha crecido de forma espectacular después de una dictadura».

«Es para apretar los dientes y tirar para adelante todos los partidos democráticos, y cada uno, con su programa electoral, que logre convencer al ciudadano para recuperar el voto. Ese es el reto que tenemos. Precisamente la política debe servir para el debate y para descubrir al adversario y si éste defiende ideas regresivas e involucionistas, como es el caso de Vox».

«Ahí es donde el PSOE tiene que hacer un planteamiento ambicioso para convencer a los ciudadanos de centro-izquierda de que somos la mejor opción y eso es lo que el presidente Sánchez va a querer hacer con el resto de presidentes y secretarios generales de las comunidades autónomas», ha dicho.

Y es que González Ramos cree que la irrupción de Vox preocupa a toda la sociedad en general, incluso a los propios ciudadanos que han votado a este partido. «Cuando les preguntan si saben que Vox plantea ir en contra de Ley de Igualdad de Género, en contra del respeto ciudadano, entre otros a los inmigrantes, o que quiere que no haya comunidades autónomas, planteamientos todos recogidos en el programa de Vox, la gente dice que no lo sabía», ha lamentado.

De ahí que haya incidido en la necesidad de «descubrir completamente a Vox, porque es la ultraderecha». «Si ha mostrado esta fuerza en Andalucía, es tiempo de, con argumentos políticos contundentes, demostrar que es una fuerza de ultraderecha, que es reminiscencia de un pasado anterior a la democracia», ha reiterado González Ramos, que ha insistido en que es necesario reflexionar sobre la involución que supone, en una España del siglo XXI que festeja el 40 aniversario de la Constitución, la llegada de una partido como Vox, pues entiende que son «palabras mayores».

«Si la sociedad europea está agitada y hay determinadas preocupaciones, la política debe de servir precisamente para avanzar en soluciones y no en enfrentamientos políticos que no conducen nada más que a la rabia y a dificultar la convivencia», algo, ha proseguido González Ramos, que puede ser negativo para los avances que España ha experimentado y las posibilidades que tiene.

Así las cosas, y tras tildar de «brutal» el hecho de que Vox haya pasado de tener cero a 12 escaños en el Parlamento andaluz tras cosechar 400.000 votos, ha afirmado, sobre la gente que está protestando en Andalucía por este motivo, que ha de salir a la calle «en el momento de votar».