«Aquí dicen -afirmó María Dolores de Cospedal refiriéndose al PSOE y a los sindicatos- que queremos desmantelar el Estado del Bienestar, pero con lo que vamos a terminar es con los contratos a dedo y las promesas de un hospital en tres años que después de 10 solo estaba hecho el 30 por 100 y se habían gastado 60 millones de euros más».
La presidenta de Castilla-La Mancha y del PP en la región aprovechó la clausura del XII Congreso del PP en Toledo para tranquilizar a los militantes de su partido con respecto al futuro de una infraestructura sanitaria vital para una provincia que representa la tercera parte de la población de la región. Allí había numerosos alcaldes y concejales, cuyos pueblos dependen de este hospital, además de los habitantes de la capital.
Por eso, Cospedal quiso dejar claro su compromiso de sacar adelante esta obra antes de las próximas elecciones, en mayo de 2015. En teste sentido, reiteró que «vamos a tener el nuevo hospital de Toledo, pero por el precio que lo tenemos que tener y que no cueste a los padres endeudarse por ellos y por sus hijos. No nos hace falta que sea el mayor hospital de Europa, era el coste de cama por habitante más alto de toda Europa». Y afirmó que «en esta legislatura lo vamos a tener».