El PP ha vuelto a denunciar hoy los «recortes» en el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) y ha detallado los «diez engaños» del Gobierno regional en esta materia, mientras que el PSOE ha asegurado que «si el PP vuelva a gobernar privatizará los hospitales» de la región.
Los portavoces del PP y del PSOE en las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Cañizares y Blanca Fernández, respectivamente, han analizado en sendas ruedas de prensa la situación de la sanidad pública de la comunidad.
Cañizares ha considerado que la gestión es «nefasta» y ha advertido de que «todos los días los profesionales mandan un SOS de rescate de la sanidad pública de Castilla-La Mancha».
Ha dicho que hay «manifestaciones unánimes de todos los sindicatos» contra la política sanitaria de García-Page, basada en «anunciar cosas, prometer planes y obras», pero al mismo tiempo «ocasionar daños difícilmente reparables en la sanidad pública de Castilla-La Mancha».
Con ello, ha detallado «los diez engaños» en esta materia, el primero, los «datos terribles» de la listas de espera, ya que hay 12.000 personas que tienen que esperar más de seis meses a ser intervenidos, cuando se trata de operaciones «de cierta gravedad».
Ha dicho, además, que «se falsean las listas de espera para no incluir las cirugías menores» y existe una «reprogramación de listas de espera» para «mejorar datos malos».
Los pacientes de oncología, por su parte, son citados para revisiones cada año y no cada seis meses, como anteriormente estaba programado, y existen «agendas cerradas».
Cañizares también ha denunciado que el gasto en infraestructuras «no llega ni al 10 por ciento» de lo presupuestado, pues solo se han gastado a 30 de octubre de 2016 un total de 3,8 millones de los 58,5 previstos.
A ello, ha añadido que «se están empezando a generar listas de espera en Atención Primaria» y que se atribuye a «errores informáticos» el «blanquear las listas de espera».
«Han sacado otra cirugía, los cateterismos, de la listas de espera para mejorar datos malos en la sanidad de Castilla-La Mancha», ha denunciado también el portavoz del PP y ha afirmado que las citas para 2018 no se asignan y «pasan a un cajón para evitar el escándalo».
Frente a estas palabras, la portavoz socialista ha pedido al PP que «pida perdón no solo por intentar privatizar hospitales» durante la pasada legislatura sino «por haber cerrado 32 Urgencias rurales» y por «haber recortado todo lo recortable en la sanidad pública».
«Que pidan perdón por haber duplicado las derivaciones a la sanidad madrileña», ha añadido Fernández, quien también ha criticado la firma de un convenio sanitario con la Comunidad Madrid al «eliminar el Fondo de Cohesión Sanitaria» y que el PP facilitase «con su voto y aplauso» modificar la ley de garantías sanitarias.
Fernández también ha recordado a los ‘populares’ que durante dos años «no hubo publicación de listas de espera y que las manipularon y hubo pruebas», al tiempo que ha apuntado que se despidieron a miles de profesionales.
Con todo, ha reconocido que «queda mucho por hacer» y «la tarea es muy ardua», pero ha defendido la gestión sanitaria realizada por el Gobierno de Emiliano García-Page.
Para ello, se ha referido a las contrataciones realizadas, al aumento de la prueba del talón, a la recuperación del servicio de pediatría en Noblejas (Toledo) o a la ampliación de las vacunas gratuitas, entre otras medidas.
«Yo creo que ya está bien, el PP si realmente se arrepiente de cómo dejó la sanidad pública que arrimen el hombro y se pongan a trabajar con el Gobierno regional», ha reclamado la portavoz socialista, quien ha añadido que «no hay nada más radical que un converso, ni nada más dañino que un cínico».