El PSOE de Castilla-La Mancha ha admitido que los resultados cosechados en las elecciones europeas de ayer no han sido satisfactorios y ha urgido a «pasar a la acción», con un «adelanto en el proceso» para celebrar primarias en el partido y agilizar el cambio de liderazgo a nivel federal.
En conferencia de prensa, la portavoz del PSOE en Castilla-La Mancha, Cristina Maestre, ha aseverado que tras «actualizar las políticas del partido», es tiempo de «actualizar los liderazgos» a nivel federal.
Maestre ha preferido no pronunciarse sobre cuánto se deben acelerar los plazos o cómo debe abordarse, porque «la fórmula la tiene que decidir el partido a nivel federal, de forma coordinada con los representantes» de las distintas federaciones.
Para Maestre, el resultado de la elecciones de ayer «no es positivo» y sí «tiene mucho que ver con una evolución del partido, que tiene que traducirse en una catarsis que nazca del cambio del liderazgo a nivel federal».
En cualquier caso, la bajada en el número de votos, que ha llevado al PSOE a lograr catorce eurodiputados, frente a los 23 obtenidos en las elecciones europeas de 2009, no es, a su parecer, responsabilidad exclusiva del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, sino que también «hay una fragmentación de la izquierda».
«Sabemos dónde han ido los votos», ha afirmado Maestre, toda vez que el PSOE en la región ha perdido 112.000 votos en las elecciones de ayer en comparación con los comicios de 2009, por lo que ha apuntado que «hay un porcentaje que ha ido a otras fuerzas nuevas, que ha recogido el voto del descontento».
Por ello, ha insistido en «adelantar el proceso» para «cambiar ya los liderazgos».
En el caso concreto de la celebración de primarias en Castilla-La Mancha y preguntada por la posibilidad de que el secretario de los socialistas en la región, Emiliano García-Page, sea el candidato de su partido a la Presidencia de la Junta el próximo año, Maestre ha trasladado esta decisión al conjunto del partido, ya que «a través de sus estructuras» se designará al candidato.
En cualquier caso, ha opinado que en el partido «cada día con más contundencia se desea que sea Emiliano García-Page», quien por su parte, según Maestre, «entiende que hay un compromiso».
«Tiene que ser García-Page el que diga si estaría dispuesto y los indicios hacen pensar que sí», ha señalado la portavoz socialista, que ha afirmado que esta opción cuenta con el apoyo de las bases y del partido en su conjunto.
En un análisis de los votos emitidos ayer en Castilla-La Mancha, Maestre ha dicho «honesta y sinceramente» que los resultados para el PSOE no han sido satisfactorios, pues no eran los esperados porque «las expectativas eran mayores», aunque ha valorado que se han recortado distancias con el PP en la región.
Precisamente al PP también ha invitado a que reflexionen sobre sus resultados y, tras criticar que los populares declaren que los comicios de ayer suponen que «los ciudadanos han refrendado con sus votos las políticas de la presidenta Cospedal», ha señalado que el PP ha perdido 140.000 sufragios, es decir, el partido que más ha bajado en la región, ha apuntado Maestre.
«Los políticos tenemos que ser honestos y reconocer los errores, pero el PP no quiere ver lo que tiene delante», ha reprochado Maestre, que ha señalado que «el 51 por ciento de los castellanomanchegos ha votado en contra de las políticas de Cospedal», puesto que el PP en la región ha recabado el 37,7 por ciento de los apoyos.
A su juicio, esta pérdida de apoyo en las urnas es el motivo de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha impulsada por el PP y que supondrá la reducción prácticamente a la mitad del número de diputados autonómicos, tras la reforma de la ley electoral.
Sin embargo, ha advertido de que, con esta futura ley electoral y aplicando los resultados de ayer, supondría que «el 25 por ciento de los votos de los castellanomanchegos irían a la basura».
«Los resultados de estas elecciones deberían hacer reflexionar al PP a todos los niveles», ha apostillado Maestre.