La diputada del PSOE Guadalupe Martín ha opinado que el Gobierno de Castilla-La Mancha está haciendo de la ley de dependencia, «la ley de la indecencia», lo que demuestran datos -ha añadido- como que cada día de julio ocho dependientes perdieron el derecho a ser atendidos y otros 10 a la prestación.
Martín ha respondido así en rueda de prensa a las declaraciones del director general de Mayores, Discapacidad y Personas Dependientes, Juan José García Ferrer, quien en una entrevista con Efe explicó la intención de la Junta de convertir la ley de dependencia en la de independencia, con nuevas prestaciones que se podrán contratar cuando la administración no las pueda ofrecer.
A juicio de la diputada socialista, la afirmación del director general es «una broma de mal gusto» pues los datos son «de lo más elocuentes». A las cifras del mes de julio, Martín ha añadido que hay 11.321 personas valoradas que no cobran la prestación económica, 4.317 a la espera de ser valoradas y más de la mitad de valoradores despedidos y otros de vacaciones y no sustituidos. A estos datos, se suma que hay 297 cuidadores que han perdido la prestación económica por la atención en el entorno familiar y que en los primeros siete meses de 2013 se ha reducido en más de 1.577 los beneficiarios de la ley, mientras que en 2012 la rebaja fue de 435.
Martín ha criticado la nueva orden sobre la dependencia que recoge el catálogo de servicios y las prestaciones económicas para las personas que necesitan algún tipo de ayuda para su vida diaria y ha lamentado que las condiciones para acceder a las ayudas sean «cada vez más duras», pues aumentan las incompatibilidades
Ha querido hacer una «llamada de atención» porque el número de ciudadanos dependientes sigue creciendo y los ayuntamientos «cada vez están más limitados para prestar servicios».
Como ejemplo de inconvenientes de la nueva orden, Martín ha expuesto que recoge que los cuidadores tienen que vivir en la casa del dependiente para poder cobrar la prestación económica por los cuidados en el entorno familiar o que cuando conviven dos dependientes en una misma vivienda sólo puede solicitar las horas de ayuda a domicilio uno de ellos.