El coordinador regional de IU, Daniel Martínez, ha alertado hoy de que Castilla-La Mancha vive «una democracia de apariencias» y ha apostado por impulsar entre los partidos políticos y los agentes sociales una regeneración institucional, política y social en la región.
Martínez, en un artículo remitido a los medios de comunicación, ha argumentado que el problema actual no es la política sino «algunos políticos y sus prácticas» y, en concreto, se ha referido a la propuesta de la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, de reducir el número de diputados autonómicos.
El dirigente de IU ha criticado a quienes usan «la mala imagen» de los políticos para «limitar la democracia» y ha opinado que, con ello, «queda más que constatado» que en la región se vive «una democracia de apariencias y muy limitada, que se reduce prácticamente a votar cada cuatro años».
«Para sacar tajada y dejar en manos de una más que reducida oligarquía la posibilidad de hacer uso del derecho de sufragio pasivo, a la vez que se multiplica el número de políticos puestos o elegidos a dedo», ha indicado.
Martínez ha avisado de que «recortar en democracia sale siempre muy caro» y ha criticado que «hasta la calidad democrática» se mida por «razones de rentabilidad económica».
Por ello, ha considerado que es «fundamental» adoptar un compromiso, que se traslade al Diario Oficial de Castilla-La Mancha, de «plena transparencia, comportamiento ético y participación ciudadana en todas las actividades y decisiones de la Administración regional y de los organismos y entidades que la integran».
«Mientras el PP y el PSOE en Castilla-La Mancha demuestran reiteradamente estar muy preocupados por mantener sus espacios de poder o chiringuitos al margen del control democrático, desde Izquierda Unida tenemos un objetivo claro e ineludible», ha aseverado.
De esta forma, ha dicho que es «imprescindible» impulsar una regeneración o democratización institucional, política y social de Castilla-La Mancha a través de mecanismos de participación ciudadana y de transparencia en la gestión públicos para los que solicita la participación de los partidos políticos y los agentes sociales.
«Lo demás, medidas como reducir el número de diputados manteniendo un sistema electoral injusto y dejarlos sin sueldo, es precisamente procurar que sean los corruptos, enchufados, los puestos a dedo, los únicos que estarán casi en solitario en la vida política», ha concluido.