El alcalde de Cuenca, Juan Ávila, ha recibido con «extrañeza», pero también con «tranquilidad», la noticia de su imputación, pero ha opinado que la jueza cambiará su decisión cuando reciba toda la información.
Ávila se ha pronunciado así en una rueda de prensa tras conocer que ha sido llamado a declarar por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Cuenca por un posible delito de estafa y prevaricación administrativa a raíz de la anulación de la contratación de un operador informático en una bolsa de trabajo municipal.
El alcalde ha confirmado que irá a declarar el 5 de diciembre, pero también ha manifestado que ha presentado alegaciones a la resolución de la jueza Olga Rodríguez.
Juan Ávila se ha mostrado convencido de que, «cuando la jueza tenga toda la información sobre lo ocurrido, cambiará su decisión» de imputarle a él y al edil responsable de Personal, José Ignacio Nicolás.
El origen del proceso está en la denuncia de un ciudadano que aprobó una plaza de operador de informática convocada por el Consistorio, de modo que su contratación fue acordada en una Junta de Gobierno Local celebrada el 15 de abril de 2011, antes de las elecciones municipales.
El 14 de diciembre de 2011, la Junta Local de Gobierno, ya gobernada por Ávila, declaró nulo el acuerdo de sus antecesores y desestimó la petición del denunciante de tomar posesión de su puesto por un informe de la intervención municipal en el que se plantea que la plaza en cuestión carecía de crédito presupuestario.