Ni tempestad ni nada que se le parezca, porque antes de que la mar se pusiera brava ya se encargaron tanto Emiliano García-Page como su equipo de calmarla. Pero sí hubo «batalla» en las horas previas a que comenzara el X Congreso Regional del PSOE de Castilla-La Mancha, cuando hubo que «convencer» al expresidente de la comunidad autónoma y actual diputado en el Congreso que desistiera de su idea de ser presidente del partido porque… Porque no iba a serlo, en definitiva.
De ahí que tras la «batalla» llegara la calma, el día después. Y el alcalde de Toledo pasó por numerosos medios de comunicación, en especial los radiofónicos, para ser entrevistado sobre todo lo que había ocurrido el fin de semana. De ahí que por la tarde se reuniera con sus concejales (en la imagen falta su portavoz en el ayuntamiento, Rafael Perezagua, quien llegaría minutos después) para comenzar a ver el plan de ajustes que tienen que realizar antes del 31 de marzo para así poder acogerse al plan que ha ideado el Gobierno de Mariano Rajoy para poder solventar las deudas que las administraciones públicas tienen con sus proveedores.
Y que en el caso del Ayuntamiento de Toledo, tal y como ha confirmado a los periodistas la vicealcaldesa Paloma Heredero, asciende a «17 ó 18 millones de euros». Heredero, además, solicitó la colaboración de la oposición (PP e IU) para, «con responsabilidad, sacar entre todos lo que más nos conviene».