La Proposición de Ley que tiene previsto presentar en breve el Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha para acabar con los privilegios que la ley del Gobierno prevé para los expresidentes de la Junta y a los que sigue acogidos el socialista José Bono podría debatirse y aprobarse antes de verano, tal y como ha confirmado hoy el portavoz del PP en las Cortes, Francisco Cañizares.
Una Proposición que tendrá que remitirse al Consejo de Gobierno, de vuelta a las Cortes para, por último, ser debatida en Pleno
Una idea que lanzó la presidenta de la región, María Dolores de Cospedal, durante el último Pleno, e instó a su grupo para que se pusieran en marcha con ella «producto de la reflexión, y es que no cabe hoy mantener los privilegios a un solo exalto cargo». Privilegios a los que ella, durante la pasada legislatura, ya renunció; igual que el expresidente socialista José María Barreda.
Según la ley del Gobierno, quienes han sido jefes del Ejecutivo regional tienen derecho a un coche oficial, conductor y secretaria, así como un despacho, durante el mismo período de tiempo que el que ejercieron el cargo.
Bono se acogió a ellos y mantiene ese personal a su servicio, con un coste de más de 160.000 euros para las arcas públicas castellanomanchegas.