Nada tiene que ver el último congreso regional del PP, celebrado en 2007, cuando María Dolores de Cospedal no era la secretaria general del partido ni la presidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha, con el que se va a celebrar en Talavera los días 5 y 6 de mayo. Ahora Cospedal es la primera presidenta que el PP ha tenido en Castilla-La Mancha, la única candidata de su partido que ha obtenido mayoría absoluta en un feudo socialista y ha sido reelegida secretaria general del Partido Popular ya en el Gobierno de España y con un Mariano Rajoy, su valedor, convertido en presidente de la nación.
El número dos del partido, Vicente Tirado, era en 2007 casi un recién llegado a la dirección que se afanaba por tapar los muchos agujeros que presentaba una organización que llevaba un cuarto de siglo en la oposición. Hoy es el primer presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha que sale del PP y el secretario Electoral del Partido Popular en España, cargo que le consiguió Cospedal en el último congreso nacional del partido, celebrado en febrero en Sevilla.
Tanto Cospedal como Tirado han adelantado su continuidad. Así que no es de extrañar que el congreso regional del PP se compare con la Liga de Fútbol española, que dado que el primer y segundo clasificado son inalcanzables, la pelea está del tercer puesto para abajo.
Va a ser un congreso continuista, eso es parte de lo poco que ha transcendido oficial y oficiosamente sobre el resultado del congreso.
No obstante, habrá que adaptar la estructura a los nuevos protagonistas del partido tras las elecciones autonómicas de 2011, con las correspondientes subidas y bajadas en el escalafón «popular» por los muchos cambios registrados desde el último congreso hasta la fecha.
Esto es lo que se dice sobre cómo puede ser la foto de los que suben y los que bajan en la próxima dirección regional del PP, la que se elegirá en Talavera.
En este sentido, se espera un ascenso importante en el escalafón del partido de Leandro Esteban, el hombre fuerte del Gobierno al frente de las consejerías de Presidencia, Administraciones Públicas y Portavoz del Ejecutivo Cospedal. Es el interlocutor del Ejecutivo y quien lleva la batuta de las relaciones con la oposición. También quien sostiene el peso de los debates parlamentarios más complicados, sean de sus áreas o no.
¿Qué papel ocupará en la estructura del nuevo PP en el poder? Eso es una incógnita, pero está claro que no será uno más de la treintena de secretarios que tiene el Comité Ejecutivo del PP CLM. Hasta ahora era el secretario de Acción Parlamentaria.
Tras la presidenta y el secretario general, el tercer escalón, el de las Vicesecretarías, será uno de los que todo parece indicar que registrarán cambios. Las ocupan en la actualidad Ana Guarinos, presidenta de la Diptuación del Guadalajara; el senador Miguel Ángel Rodríguez y Francisco Pulido, exalcalde de Cuenca, actualmente en la oposición. La política guadalajareña sigue conservando su peso, pero parece que tanto Rodríguez como Pulido dejarán de tener la relevancia que consiguieron en el organigrama salido del último congreso.
El siguiente escalón es el de los coordinadores. Actualmente son siete: Antonio Serrano, en Organización, hoy senador y uno de los candidatos seguros a seguir, ya que goza de la confianza plena del secretario general; en Presidencia, María Jesús Bonilla, hoy alcaldesa de Tarancón; en Política Social, María Crespo; en Política Económica, Francisco Cañizares; en Política Local, Benjamín Prieto, presidente de la Diputación de Cuenca; en Comunicación, con funciones de portavoz, la senadora Carmen Riolobos; y en Acción Política Jesús Labrador, hoy delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha.
Además de Serrano, en fuentes del PP se considera más que probable la permanencia de Riolobos en sus actuales funciones. En cuanto a Bonilla, podría moverse de su actual puesto en el Ejecutivo si finalmente se decide que ocupa la presidencia provincial del PP en Cuenca, un puesto que en caso contrario parece que recaerá en Benjamín Prieto.
Es una incógnita para la mayoría el papel que se dará al delegado del Gobierno, Jesús Labrador, amigo personal de Tirado y también hombre de confianza del presidente de la Diputación de Toledo y del PP provincial, Arturo García-Tizón.
Otra incógnita es el papel que se le reserva a Cañizares, que era concejal en Ciudad Real en el último congreso y ahora es el portavoz del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes regionales, otro de los que «sube».
Además de los nombres y los cargos, internamente en los partidos se miran mucho los puestos que cada provincia o ciudad importante consigue en la dirección regional y cómo se premia a los que llevan más votos al fondo común y qué papel se da a los que los pierden.
Este congreso no estará exento de ese morbo, como les contaremos más adelante.