Regresó durante un fin de semana a «su» tierra. El concejal socialista de Toledo Rafael Perezagua, portavoz del Gobierno municipal de Emiliano García-Page en el Ayuntamiento de Toledo, rememoró los años en los que estuvo trabajando en la capital andaluza antes de llegar a la capital de Castilla-La Mancha. De hecho, su plaza de funcionario está en la Junta de Andalucía, en Servicios Sociales, por si algún día…
Por eso su vuelta a Sevilla fue, para él más que para el resto de la delegación toledana y regional, muy emotiva. De hecho, el viernes por la tarde, cuando ya estaba en el hotel Renacimiento junto al resto de sus compañeros, se encontró de frente con el todavía presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, quien nada más ver a Perezagua se fue a saludarle y ambos se dieron un fuerte abrazo. Intercambiaron pareceres e impresiones (a pesar de que el andaluz apoyó a Chacón y Perezagua era simpatizante de Rubalcaba) y se desearon suerte para el futuro, además de recordar viejos tiempos.
Apenas unas horas después, ya el sábado por la mañana y en el mismo lugar, Perezagua se encontró con el que fuera durante varios años alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (en las últimas elecciones municipales no fue el candidato socialista) y la escena se repitió: un abrazo y una conversación de unos minutos para recordar viejos tiempos.
El domingo 5, justo después de comer, Perezagua regresaba a Toledo (es natural de Yuncos) junto a sus compañeros toledanos y con la vista puesta en el futuro. Seguro que aún recuerda cuando, hace ya unos cuantos años, llegó a la capital regional desde Sevilla para trabajar en la Delegación del Gobierno con quien entonces era su titular, Daniel Romero.