Los más de 400 alcaldes socialistas de Castilla-La Mancha reunidos hoy en Toledo para denunciar el trato discriminatorio de la Junta en favor de municipios del PP han anunciado que tomarán medidas reivindicativas «de todo tipo» y, si pueden demostrarlo, denunciarán al Gobierno regional por prevaricación.
Así lo han anunciado en una rueda de prensa tras la reunión que han mantenido esta mañana los 439 alcaldes del PSOE en Castilla-La Mancha, que han acordado constituirse en una plataforma para combatir el «comportamiento inaceptable» y «sectario» de la Junta.
«Están llegando las cosas a una situación inaceptable, vamos a adoptar medidas de todo tipo, políticas, institucionales, reivindicativas, mediáticas y judiciales para defender con fuerza y claridad a aquellas personas a las que nos debemos, que son los ciudadanos», ha señalado el secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, José María Barreda.
El expresidente socialista ha denunciado el «enorme malestar» que tienen con el Gobierno de María Dolores de Cospedal, que «castiga a algunos de los ciudadanos de Castilla-La Mancha solo por haber elegido libremente quién era su alcalde o alcaldesa», algo, que según ha dicho, no hacían ni él ni José Bono al frente del Gobierno de la región.