Los diputados de las Cortes de Castilla-La Mancha no recuperarán esta legislatura el salario fijo suprimido en 2013 sino que será la siguiente, con el fin de «no cambiar las reglas a mitad de juego», según desvela en una entrevista con Efe el presidente del Parlamento, Jesús Fernández Vaquero.
El presidente de las Cortes asegura que, pese a que no era lo previsto, los tres grupos (PP, PSOE y Podemos) están «de acuerdo» con aplazar hasta la próxima legislatura que los parlamentarios recuperen la dedicación exclusiva.
«Sobre todo, para no cambiar las reglas de juego de los diputados en ejercicio», expone Fernández Vaquero, quien argumenta que no se puede «obligar» a un diputado «que es maestro a que deje de serlo y luego esté tres años aquí y no haya cotizado a la Seguridad Social y no le sirva para la jubilación».
Así, señala que su idea es «empezar a trabajar», aprobar esta legislatura la reforma del Reglamento del Parlamento para recuperar la dedicación exclusiva y el sueldo de la mayor parte de los diputados autonómicos, y que entre en vigor en 2019.
También apunta que, «lo más importante», es que se va a evitar «estar hablando 3 ó 4 meses del sueldo de los diputados, de luchas, de dimes y diretes, y de peleas innecesarias».
Fernández Vaquero desvela que ha hablado con el secretario general del PP de Castilla-La Mancha y vicepresidente segundo de las Cortes, Vicente Tirado, y con el líder regional de Podemos y vicepresidente primero, José García Molina, y «están de acuerdo».
Admite que quizás las discrepancias surjan sobre la cuantía de los salarios y, en este sentido, propone «equipararlos a los de otros cargos de la Administración», que por ejemplo «el presidente de las Cortes cobre lo mismo que el vicepresidente del Gobierno de Castilla-La Mancha o de Asturias o que un secretario de Estado».
«Que quien entre sepa claramente cuál es su sueldo y las reglas del juego», asevera Fernández Vaquero, quien insiste en que los diputados del PP -la mayoría de los cuales no cuenta con salario fijo esta legislatura (solo lo tienen los miembros de la Mesa de las Cortes, los portavoces de los tres grupos parlamentarios y los presidentes de las comisiones)- están «absolutamente de acuerdo».
Argumenta que los ‘populares’ «tienen muchos alcaldes que cobran de sus ayuntamientos» y recuperar la dedicación exclusiva les puede «perjudicar».
Con la entrada en vigor de la nueva norma el 1 de enero de 2013, los diputados de Castilla-La Mancha pasaron a cobrar unos 1.555 euros al mes, 955 de indemnización fija y unos 600 euros de dietas, frente a los 3.650 euros con los que contaban de salario mensual fijo.
Por otra parte, sobre la reforma del Estatuto de Autonomía, el presidente de las Cortes advierte de que es «fundamental saber la composición del Parlamento nacional» y, por tanto, «necesariamente, tiene que ser negociado».
«Y, aunque no fuera necesario, habría que hacerlo negociado», afirma Fernández Vaquero, quien opina que llegar a un consenso «no es problema» si se aparta «de una manera inteligente el tema de un conflicto fundamental, que es el agua».
Para el presidente del Parlamento autonómico, «si el tema del agua se negocia por los presidentes autonómicos, si se llega a un acuerdo, eso lo van a respetar en el Congreso y aquí».
Y, sobre la reforma de la ley electoral, también aboga por «cambiarla de manera consensuada» y dice que «lo ideal sería hacer una ley electoral automática, que no haya que estar continuamente modificándola, como la ley estatal».
«Es la mejor manera de evitar la tentación de los presidentes de cambiar la ley electoral para beneficio propio», considera el presidente de las Cortes, quien apunta que la expresidenta regional, María Dolores de Cospedal, «perdió porque cambió su propuesta de ley electoral».
«PAGE ACABARÁ LA LEGISLATURA, PIDO SERIEDAD A GARCÍA MOLINA (PODEMOS)»
El secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Vaquero, opina que el presidente autonómico, Emiliano García-Page, acabará la legislatura a pesar de la ruptura del pacto de investidura por parte de Podemos, a cuyo líder regional, José García Molina, pide seriedad.
Fernández Vaquero critica la ruptura de pacto de investidura que el lunes anunció García Molina, una medida que achaca a una decisión adoptada por el líder nacional de la formación, Pablo Iglesias, quien, según su argumento, dio instrucciones a los dirigentes regionales para que «apretasen en sus comunidades autónomas», e incluso añade: «Nos consta que ha habido esas instrucciones».
Fernández Vaquero rechaza tanto las formas de comunicarlo, -«de pronto un zapatazo, anunciado en plasma, leído, no admitiendo preguntas»-, como el fondo, pues si bien le dice a García Molina que «no hay que estar de acuerdo ni tragar con lo que uno no quiere tragar», reivindica que el 80 por 100 de las medidas del pacto de investidura fueron propuestas del PSOE.
«Yo estuve en el acuerdo. Un 80 por 100 del acuerdo fueron propuestas que hicimos nosotros, lo puedo decir porque es verdad y es así. Todas las propuestas de empleo, que son la mayoría, las hicimos nosotros. Él no habló nunca de propuestas de empleo, no habló de eso, me reservo de lo que habló, pero de empleo no. Se lo puedo asegurar», remarca Fernández Vaquero.
Por ello, considera que la ruptura del pacto de investidura se debe a que García Molina, a quien ve «totalmente desbordado con la acción de gobierno y confunde una cosa con otra», «tiene que hacer su juego», si bien señala que Podemos «no es gobierno», sino «un grupo político que ha llegado a un acuerdo de principios de legislatura con el PSOE, que se está cumpliendo prácticamente en su totalidad en el primer año».
Insiste en que en este año y dos meses no ha habido «mayores problemas» y lamenta que, pese a ello, García Molina está «continuamente amenazando, buscando qué libro o qué película nos recomienda para plasmar sus ideas».
En esta línea cinematográfica, compara la situación con «Amanece que no es poco», del director albaceteño José Luis Cuerda, y subraya: «Esto es surrealista».
Por lo tanto, para Fernández Vaquero, los argumentos aportados por Podemos de que no se está cumpliendo el pacto de investidura no se sostienen, del mismo modo que tampoco tienen fundamento el que el grupo socialista no haya apoyado determinadas resoluciones en las Cortes o que algunas de éstas no hayan sido puestas en marcha por el Gobierno regional.
«Las resoluciones son un acuerdo de principio político, es ‘mi partido político piensa sobre este tema esto’. Una resolución no es una obligación para ningún gobierno, ponerlas en funcionamiento», considera el también presidente de las Cortes regionales.
También afea Fernández Vaquero que el Gobierno regional ha llamado hasta en cinco ocasiones a los parlamentarios de Podemos desde que hicieron pública la ruptura del pacto y éstos no han cogido el teléfono, aunque admite que él personalmente no ha llamado a García Molina -vicepresidente primero del parlamento autonómico- porque ha estado «disgustado», y ha esperado a verlo en la reunión de la Mesa de las Cortes que se celebró ayer.
«No me parece serio, no ya en lo político, sino en lo personal. Creo que no viene a cuento una actuación de esta manera. Se puede discrepar, pero todo lleva un proceso», reflexiona Fernández Vaquero, que considera que si Podemos vota en contra de los presupuestos de 2017 por la ruptura del pacto de investidura, «tendrán que explicar a los ciudadanos por qué ha votado en contra de que haya más médicos o más profesores».
Y recuerda que el 15 de septiembre, los dos diputados de Podemos en las Cortes votaron a favor del techo de gasto para 2017, y que después han estado «más o menos de acuerdo con el grueso de los presupuestos», por ello insiste en su idea de que la ruptura del pacto se ha debido a «una llamada de Madrid, donde se dijo ‘tienes que romper y búscate la excusa’ y la excusa no existe porque no hay».
En este sentido, comenta el tuit de Podemos Castilla-La Mancha del miércoles 28 de septiembre, tras conocerse que el presidente autonómico estaba entre los dimisionarios de la Ejecutiva Federal y escribió: «.garciapage está entre los firmantes… como siempre más pendiente de lo que pasa en Ferraz que de lo que pasa en CLM».
A este respecto, Fernández Vaquero sospecha que «García Molina es un producto de sus propias obsesiones, él está obsesionado con Madrid, con seguir al pie de la letra las instrucciones de Pablo Iglesias», al tiempo que opina que también está «preocupado» por lo que pasa en Castilla-La Mancha, ya que recuerda que 200 militantes de Podemos en la región, entre ellos el diputado David Llorente, han firmado un manifiesto pidiendo primarias en el partido.
A pesar de todo ello, Fernández Vaquero asegura que no han tomado en consideración la oferta de colaboración lanzada por la expresidenta castellanomanchega, María Dolores de Cospedal, que demuestra «un cinismo impresionante».