Entre «vividores» y «sinvergonzonerías». Entre Carlos Velázquez, diputado regional del PP; y José Molina, diputado regional del PSOE. Les explicamos.
Salió el «popular» a la tribuna para defender la propuesta de reducir a la mitad el número de diputados en las Cortes de Castilla-La Mancha que significó la «bomba» del discurso de María Dolores de Cospedal el día anterior y fue noticia de alcance nacional.
Velázquez soltó una frase que encolerizó a los diputados socialistas: «Queremos buenos profesionales, no vividores de la política».
Y acto seguido se acordó de aquellos que salen de la Universidad y, «recién licenciados se suben al coche oficial», en clara referencia al secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
«RODEAN EL PARLAMENTO DE POLICÍAS PARA QUE NO ENTRE EL AIRE FRESCO»
Llegado el turno de Molina, el ambiente se calentó. Estaba cabreado por el término «vividores».
De hecho, lo primero que dijo fue que es tan ejemplar la labor del Gobierno de Cospedal «que rodean el Parlamento con policías para que no entre aire fresco y nadie pueda decirles la sinvergonzonería que están haciendo».
Y preguntó que si el término «vividores» también servía para diputados como Vicente Tirado, presidente de las Cortes y a quien se dirigió expresamente dándose la vuelta desde la tribuna; la propia Cospedal o las consejeras Marisa Soriano o Carmen Casero.
Además de recordarle que hace sólo unos meses fue el propio Gobierno quien propuso y la Cámara aprobó el cambio de la Ley Electoral de la región y, por lo tanto, el aumento del número de cuatro diputados más. «Dijeron que a más diputados, más democracia; pero ahora…».
Terminó preguntando que por qué sólo se quedaban sin sueldo los diputados, «¿por qué no se les quita el sueldo también a los miembros del Gobierno y a todos los altos cargos y asesores que hay?».