El consejero de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Marcial Marín, ha denunciado las «desviaciones alarmantes» que su equipo encontró en la consejería a causa de la gestión del anterior gobierno socialista, desviaciones marcadas por las «importantes diferencias» encontradas entre los créditos iniciales y los créditos definitivos y reales. Así lo ha puesto de manifiesto durante la Comisión de Economía y Presupuestos celebrada en las Cortes regionales para informar sobre la ejecución presupuestaria de 2011 y el proyecto de ley de presupuestos generales de la Junta para 2012.
En relación a la ejecución presupuestaria de 2011 ha destacado el «elevado» grado de ejecución «gracias al esfuerzo de este gobierno», siendo el gasto de 2.379 millones de euros, de los que se ha autorizado -a 31 de diciembre del año pasado- un 93 por 100. El consejero ha puesto el acento en el capítulo uno, el referido a los gastos de personal, donde su equipo, según ha indicado, tuvo que afrontar una «infradotación» ya que el anterior ejecutivo contempló inicialmente 1.200 millones en gastos siendo el gasto real de más de 1.300 millones de euros. «El presupuesto partía de una insuficiencia no reconocida», ha apuntado.
En su intervención ha señalado las tareas de supervisión y control de gasto en todo el presupuesto de 2011 y en particular en el apartado de gastos corrientes y prestación de servicios, área en el que se incluye el transporte escolar, los comedores, la red de teatros… Con un gasto de 216 millones de euros y una ejecución del 91,4 por 100, ha hecho mención al mantenimiento del programa del deporte escolar; al gasto de ocho millones de euros que han supuesto los contratos para la construcción de 11 institutos y que hasta 2037 supondrán un total de 354 millones; o al «gasto excesivo que actualmente no es posible mantener» del transporte escolar, con un coste anual de 43 millones de euros.
Estima que en este capítulo la diferencia entre los créditos iniciales previstos y los definitivos asciende a 50 millones de euros, «en parte por los gastos de propaganda del anterior gobierno», gastos que aumentaron en un 287 por 100 «mientras se paralizaba la creación de institutos y colegios».
Siguiendo con las prácticas «irregulares» del gobierno socialista, y respecto al capítulo cuatro de transferencias corrientes -aquel que incluye el mantenimiento de la educación concertada, la universidad, las ayudas a la educación de personas adultas o la gratuidad de material escolar, entre otros-, ha criticado la rebaja «año tras año» en la transferencia nominativa a la Universidad de Alcalá y la ausencia de notificación a esta institución, de ahí que ahora -«por culpa de la gestión del PSOE»- la Universidad «demande a la Junta cuatro millones de euros». Igualmente ha denunciado que el ejecutivo de José María Barreda no hubiese convocado la línea de ayuda al deporte, ni a los ayuntamientos para asumir el coste del servicio de bibliotecas, «a pesar de la existencia de crédito». Ha añadido que el curso 2011-12 empezó con 15 nuevos centros educativos y que no fueron más «debido a la falta de compromiso del gobierno socialista».
En segundo lugar, Marín ha ofrecido las líneas básicas de los presupuestos de 2012, «los únicos posibles para garantizar el servicio público de educación». Ha recalcado que «apostaremos por el rigor, el control y la eficiencia en el gasto público», sin perder de vista «un marco económico excepcional» y con un contexto regional «muy complicado». Considera que el PSOE «ha hipotecado dos generaciones enteras de castellanomanchegos y es el responsable del techo de gasto de la consejería».
Ha desglosado que el presupuesto de 2012 de la consejería es de 1.627 millones de euros, de los que 1.565 millones van destinados a educación y el resto repartidos entre cultura y deportes, unas cuentas «austeras gracias a la contención del gasto y a la optimización de los recursos» que, en su opinión, ponen en evidencia dos modelos educativos diferentes, «el del PSOE y el que hace un gobierno responsable».