El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha salido al paso de las declaraciones del presidente regional, Emiliano García-Page, quien aseguraba en una entrevista en el diario La Razón que si no se reacciona en el conflicto con los independentistas, después de articular la ley de Amnistía llegará el referéndum de autodeterminación en Cataluña: «De nada vale hablar si no se va a actuar».
Así ha reaccionado durante un acto público en Guadalajara, donde ha cargado contra el «socialismo de Castilla-La Mancha» y ha recordado que los diputados del PSOE presentes en el Congreso siempre se alinean con la disciplina de voto.
«Es Page quien le puede quitar las pilas del mando a distancia de la legislatura a Puigdemont. Bastaría eso para que se acaben los acuerdos con independentistas», ha aseverado. «De nada vale hablar si no se va a actuar, de nada vale dar titulares si después todos son responsables por acción o por omisión de lo que se está haciendo».
Falta de Guardia Civil en la provincia
Por su parte, el presidente provincial del PP de Guadalajara, Lucas Castillo, ha denunciado la desigualdad que provoca en su territorio la falta de agentes de Guardia Civil, creando una sensación de inseguridad ciudadana en los 288 municipios de la provincia.
Así, ha recordado el anuncio del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, de reestructurar la implantación de la benemérita en el país, algo que, según Castillo, «traducido al léxico socialista» quiere decir que van a suprimir los puestos auxiliares, algo que afectará a múltiples municipios de Guadalajara ya que implicará que los agentes dejarán de tener presencia.
Además, ha valorado que «no se puede sustituir agentes por cámaras de seguridad», lamentando que nadie querrá ir a vivir a los pueblos de la provincia si no cuentan con la presencia de la Guardia Civil y la seguridad que aporta al entorno.
«Sánchez rompe la convivencia entre españoles por conveniencia política»
La alcaldesa de Guadalajara, Ana Guarinos, ha aprovechado su turno de intervención para denunciar las desigualdades que provoca el gobierno de Sánchez, que rompen la convivencia entre españoles por conveniencia política.
Así, ha criticado que sean siete votos los que decidan el futuro de España y Guadalajara, y ha recordado que, desde la ciudad, se ha alzado la voz alto y claro diciendo no a la amnistía, fue el pasado 12 de noviembre, cuando más de 9.000 guadalajareños se manifestaron en contra de los dislates de Sánchez.
Guarinos no ha querido dejar que pase la ocasión de recordar que el exalcalde de la ciudad Alberto Rojo ha dicho sí a la amnistía, plegándose a su jefe, Pedro Sánchez, por un sueldo y unos meses más en un sillón.
Ha lamentado así, que los socialistas no piensen en el beneficio para Guadalajara, ya que no aporta ninguno, y piensen más en robar las inversiones que pertenecen a la ciudad para dárselas a otros.