«Es evidente que el camino que reclama este país es el de avanzar, profundizar en un cambio constitucional que blinde la sanidad, la educación, los servicios sociales y la dignidad como pueblo». Así se ha expresado el secretario general del PSOE de Castilla La Mancha y vocal de la Ejecutiva Federal antes de intervenir en un acto en Albacete con Juventudes contra la Ley de Seguridad Ciudadana, la llamada ley mordaza. Para el dirigente socialista, «el PSOE tiene un compromiso nítido con la igualdad y la libertad y por tanto rechazamos una ley que pretende recortar la libertad y la democracia, como es la ley mordaza». Y ha asegurado que el Partido Socialista «la derogará» en cuanto gobierne y «buscará todos los consensos constitucionales para profundizar en la modernización» del país.
Según informa el partido en nota de prensa, García-Page ha denunciado en Albacete que «Rajoy no solo ha recortado la sanidad o la educación» sino «que está recortando la democracia para evitar que la gente hable de los recortes». Es «obsceno», dice el socialista, «comprobar cómo en pleno siglo XXI el Gobierno responde a la tensión social con multas, con mordazas y con leyes que no pueden hacer sentirse orgulloso» a ningún ciudadano. En España «hay ansia de recuperación económica, de recuperación del empleo y de una recuperación de la política», ha continuado el dirigente del PSOE de Castilla-La Mancha.
Y por eso el PSOE insiste «en abrir el debate» para lograr «el consenso constitucional» porque la Constitución mantiene «su vigencia, pero defendemos al mismo tiempo la necesidad de anticiparse a los cambios que reclama la gente». «Hay que dialogar y a la vez volver a coser los consensos constitucionales», ha reiterado García-Page, que se ha mostrado convencido de que Rajoy «no es la persona indicada» para «el liderazgo de poder curar las heridas de la crisis y para conseguir consensos constitucionales».
Tampoco acepta el socialista que el presidente del Gobierno diga que la crisis es historia. «Resulta obsceno o bastante vergonzoso que, a las puertas de la Navidad, en la que millones de personas cobran menos que antes y millones de personas siguen en el paro» haga Rajoy esa afirmación que es «muy difícil de mantener en cuanto uno sale a la calle» cuando «nueve de cada 10 españoles están en peores condiciones que cuando empezó la crisis».