El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha hecho un vuelto a insistir que el reconocimiento de la pluralidad no está reñido con la unidad de España, pero ha reprochado quien usa esa pluralidad para «conseguir un privilegio o usarla como arma arrojadiza».
Y es que en la inauguración del congreso Culinaria en Cuenca, Page ha hecho un símil del reconocimiento de la pluralidad en lo político, con el que pasa en la gastronomía, donde en cada lugar se defiende lo que se come, «sin sentimiento excluyente», puesto que para el «la unidad no excluye pluralidad».
«Quien usa la pluralidad para con seguir más derechos que otros, o para considerarse mejor que otro, mal camino», ha insistido el presidente regional, en clara referencia al discurso que tiene habitualmente, de críticas a los independentistas, y en plena polémica por las negociaciones de una ley de amnistía por el «procés» catalán.
Así, ha querido defender que en España «tenemos una variedad enorme», pero que eso debe servir para potenciar la riqueza cultural del país y no para separar a los distintos territorios.
Page ha recordado que en el mundo globalizado, «la diversidad y el hecho de ser de nuestro sitio no se ha reñido del todo con ser ciudadano del mundo», recordando que esta ha traído cosas buenas, a pesar de que «nos ha hecho sentirnos más de nuestro terruño».