El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha confirmado hoy que no acompañará a ninguno de los precandidatos a liderar el partido que hagan campaña en la región «para que nadie pueda malinterpretarlo».
A preguntas de los periodistas antes de visitar en Toledo las obras de restauración en el entorno de la Plaza de Amador de los Ríos, García-Page ha asegurado que su intención es que todos los precandidatos «estén acompañados por los responsables provinciales y por gente de la ejecutiva regional pero no por el secretario general».
«Tengo muy claro», ha asegurado, que «los que tenemos alguna capacidad de influir nos mantengamos en una posición de no interferir».
Para García-Page, que ha insistido en que tiene «la mejor opinión de todos» los precandidatos, lo «verdaderamente relevante» es que el PSOE está haciendo un proceso en el que «le da la palabra y el voto a los militantes».