El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, considera que las elecciones primarias de su partido deberían de celebrarse antes de las elecciones locales y autonómicas de 2015 y sólo decidirá sobre su futuro en el partido cuando se abra ese proceso.
«Sólo tomaré un planteamiento personal y una decisión personal de las candidaturas que sean en el momento en que se abran los procesos», ha dicho el también alcalde de Toledo a los periodistas.
García-Page ha matizado que esta posición afecta tanto a las primarias regionales como a las nacionales.
Lo que le «interesa de verdad», ha dicho García-Page, es que se abra esa agenda de cambio en el PSOE porque lo necesita la sociedad española y porque el PSOE siempre ha sido un partido que abandera el cambio, incluido su propio cambio».
El responsable regional de los socialistas de Castilla-La Mancha ha insistido también en que no quiere que «se especule» con su persona, ya que, ahora, su principal responsabilidad es ser secretario de Castilla-La Mancha y a nivel institucional alcalde de Toledo.
«No pretendo ni mucho menos -ha señalado García-Page- que se especule con mi persona y cuando llegue el momento y se abra el proceso de selección de candidaturas a todo, tanto a las autonómicas como a nivel nacional», tomará una decisión.
Considera que «la ventaja» que tiene el PSOE es que tiene mucha gente preparada, muchos conocidos y muchos otros desconocidos, esa es la gran ventaja, empezando por el propio secretario general, ya que Rubalcaba «es de los políticos mejor preparados en este país».
POR UN PSOE FUERTE Y SOLVENTE
El representante socialista cree que al país le interesa que el Partido Socialista sea «fuerte y solvente y con más razón, todavía, para los tiempos que vienen, porque, estamos rodeados de tensiones, tanto en el ámbito social, económico y territorial».
El PSOE -ha dicho García-Page- ha de ocupar un espacio de «centralidad, desde el punto de vista del modelo político y territorial y esa fortaleza tiene que ver con una renovación en el campo ideológico y tiene que ver también con una renovación en sus planteamientos, en sus mensajes y, probablemente, en sus personas»
Se trata de un reto que se ha de plantear a lo largo de este mandato, «sin ningún fanatismo», y aunque dice estar dispuesto a cualquier opinión y razonamiento que sea, «en todo caso» debería ser antes de las próximas elecciones municipales y autonómicas» de 2015.
Y ello por la «presión», dice, que está sintiendo el PSOE por parte de la ciudadanía para que este partido ofrezca un planteamiento «potente, solvente y de cambio» y que es «inversamente proporcional» al desengaño con el Gobierno».
No obstante, entiende que «lo más importante» que tiene que hacer ahora el PSOE, más que mirarse el obligo, es estar pendiente de la crisis: que va a pasar con el rescate, como puede España salir de la situación que tiene y como podemos frenar el deterioro de los servicios públicos, de la calidad de vida, del bienestar y el empleo. Eso es lo importante, ha señalado el secretario regional del PSOE.
Y, solo cuando esto esté «encauzado o tengamos una acción definitiva podemos plantarnos calendarios que son muy secundarios, pues lo verdaderamente importante es el calendario de la crisis».