El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha y alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha indicado que su grupo parlamentario en las Cortes regionales presentará una propuesta para que los familiares de los políticos no puedan ocupar cargos en los consejos de administración de empresas relacionadas directa o indirectamente con los gobiernos.
La medida se une a la ya formulada en el seno del PSOE de Castilla-La Mancha para que se aplique en toda España la retirada de los pluses para los altos cargos que vuelven a la función pública.
Dice que así se podrá ver si la presidenta de la región y secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, es coherente. Opina que «el que de lecciones de transparencia me parece una broma de mal gusto».
Sobre este asunto también ha hablado el concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Toledo, Jesús Nicolás, al que un medio de comunicación ha señalado como uno de los ex altos cargos que habían desobedecido una supuesta instrucción de Page para presentar recursos contra la eliminación de ese plus. En este sentido, Nicolás sostiene que en el PSOE no hay ninguna directriz para presentar o no recurso y que él, por estar en excedencia, no puede interponerlo. Ha insistido, no obstante, en que es una «actividad privada».
El edil sostiene que lo que está haciendo el PP es «mobbing» con los funcionarios que son el PSOE, máxime cuando -según ha puesto de manifiesto- Cospedal recibe un complemento de 3.500 euros por haber sido abogada del Estado. Se preguntaba a este respecto por qué a este dinero que recibe la presidenta lo llaman complemento y a los 137 euros que debería percibir un ex alto cargo por volver a su plaza de funcionario lo llaman «plus vitalicio». Defiende que esos ex altos cargos tienen derecho a percibir ese dinero y «si el PP no quiere que se cobre lo que debe hacer es cambiar la normativa».