Pues sí, así como lo leen. He aquí algunos de los calificativos que ha citado esta mañana, durante el Debate sobre el Estado de la Región que se celebra en las Cortes regionales, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, «insultos que me han llamado los del PP» durante los 15 meses que llevamos de legislatura.
Page, en su escaño de las Cortes, junto al vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro.
Son estos:
«Trilero, Judas, capo de la mafia, pequeño Artur Mas, que no estoy bien de la cabeza porque me fumo alpacas de marihuana, el destructor, hace llorar a los niños porque no los da de comer, caradura, Atila, el coletas de Castilla-La Mancha, se salta la ley, hombre anuncio, cara de cemento armado, vago, un lastre para nuestra tierra, moroso, vendedor de humo, hipócrita, fariseo, utiliza métodos más propios de regímenes totalitarios, Nostradamus de pacotilla y presidente de secano».
De todos ellos, Page ha señalado que no entiende el último, el de «presidente de secano». Y ha recalcado que en política «no vale todo. Porque insultar, ir de radicales y decir que no a todo está tirado, es fácil; para lo que hay que tener coraje y determinación es para ser moderados, para buscar consensos, para sobreponerse a los insultos y a los ataques…».