El PP de Castilla-La Mancha ofrece al presidente regional, Emiliano García-Page, apoyar los presupuestos autonómicos de 2018 y «estabilidad» hasta el final de legislatura a cambio de bajar impuestos y cesar al vicepresidente segundo, Jose García Molina (Podemos), que defiende el referéndum en Cataluña.

Este ofrecimiento «muy importante» al jefe del Ejecutivo regional lo ha realizado hoy en rueda de prensa el secretario regional del PP de Castilla-La Mancha, Vicente Tirado, quien ha defendido la unidad de España, algo contrario, ha señalado, a que haya un referéndum en Cataluña.

«Que se vote en Cataluña, como defiende el vicepresidente segundo, no es defender la democracia sino atacar la unidad de España», ha resaltado Tirado, quien ha indicado que el ofrecimiento no es nuevo pero la diferencia es que ahora hay un miembro del Gobierno regional que «aboga por la autodeterminación».

A su juicio, los castellanomanchegos «no podemos quedarnos indiferentes porque Castilla-La Mancha está muy alejada de los planteamientos» de García Molina, y, de hecho, ha vaticinado que más del 90 por ciento de los votantes socialistas estará de acuerdo con su oferta.

A cambio de su ofrecimiento de apoyar el presupuesto autonómico de 2018, el PP «solo» pide la bajada de impuestos y el cese de García Molina, pero no quiere «ni vicepresidencias, ni consejerías, ni altos cargos».

Ha manifestado que ni Susana Díaz en Andalucía ni Guillermo Fernández Vara en Extremadura tendrían en sus gobiernos a un vicepresidente «que abogara por la autodeterminación y la independencia de Cataluña» y ha insistido en que García-Page se equivocó al incluir a Podemos en su Gobierno «y desde el PP le ofrecemos una solución».

La alternativa que ofrece el Partido Popular, ha señalado, es tener un gobierno «moderado», «equilibrado», sin «extremistas ni radicales», que de «soluciones» y en el que todos los castellanomanchegos se sientan reflejados.

En cuanto a la bajada de impuestos ha dicho que beneficia «a todos», desde los autónomos hasta los trabajadores y los empleados públicos, porque bajar impuestos «significa reactivar la economía» y, así, ayudar a los ciudadanos.

PSOE ve una «trampa» en el ofrecimiento del PP a apoyar presupuesto de 2018

El PSOE considera que el ofrecimiento del PP al presidente regional, Emiliano García-Page, de apoyar el presupuesto de 2018 si baja impuestos y cesa al vicepresidente segundo, Jose García Molina (Podemos), es una «trampa» como se ha demostrado en la «dilación» del PP al presupuesto de 2017.

En rueda de prensa, el diputado del grupo parlamentario socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha Fausto Marín ha respondido a la oferta que hoy ha hecho a García-Page el secretario regional del PP de Castilla-La Mancha, Vicente Tirado.

«Pensábamos que iba a decir que Cospedal iba a dejar la Presidencia del PP de Castilla-La Mancha o que iba a ser la próxima candidata. Cualquier otro tema, pero nunca jamás en la vida pensábamos que iba a ofrecer, otra vez, el tema de los presupuestos», ha señalado Marín con ironía.

Ha criticado que el PP haga este ofrecimiento después de haber intentado «dilatar lo más posible» la aprobación de las cuentas autonómicas de 2017, algo que también hará en 2018 a su juicio.

Fausto Marín ha defendido que García-Page «sabía perfectamente qué estaba haciendo» al incluir a dos miembros de Podemos en el Consejo de Gobierno, y ha argumentado que «no es rehén de nada» y va a intentar «por todos los medios» que se apruebe el presupuesto de 2018, porque supondrá mejores servicios para los ciudadanos, como ocurre con los de 2017.

El parlamentario socialista también ha criticado a Tirado y a los dirigentes del PP que creen tener «el marchamo de ser orgullosos españoles» y ha subrayado que los miembros del PSOE «nos sentimos orgullosos de ser españoles, y castellanomanchegos, y andaluces, y extremeños».

Respecto a la condición del PP de bajar impuestos, Marín ha dicho que cuando el Partido Popular gobierna sube impuestos y cuando está en la oposición quiere que bajen.

Y en cuanto a la situación en Cataluña, el parlamentario socialista ha apuntado que el PSOE «siempre va a estar a favor de que la unidad de España sea una realidad», pero también ha reflexionado que después del 1 de octubre llega el 2 de octubre y «debe tomarse una decisión política y no judicial».