El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha dado su visto bueno al objetivo de déficit del 1,3 por 100, que es «necesario y razonable», y ha avanzado que el nuevo techo podría evitar la implantación de «algún nuevo impuesto» previsto en la comunidad.
A la salida del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), que ha presidido el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, Romaní ha destacado la «buena posición» de su Gobierno para acometer el ajuste que les ha pedido el Ejecutivo central, y ha recordado que «en los últimos dos años han logrado la mayor reducción de déficit de España y de todas las finanzas públicas del mundo».
El consejero ha precisado que será en un próximo CPFF cuando el Gobierno de a conocer el objetivo de déficit individualizado para cada comunidad autónoma, y ha señalado que antes las autonomías mantendrán reuniones bilaterales con el Gobierno.
Ha incidido en que si bien su presupuesto se ajusta al 0,9 de déficit previsto, en principio, un aumento del margen podría evitar subidas de impuestos y ventas de edificios y otras propiedades.
Asimismo, ha hecho hincapié en las «posibilidades de ahorro» que ofrece la reforma de la Administración Pública, cuyo informe ha sido presentado por Montoro a los consejeros autonómicos, que permitirá hacer la gestión «más eficiente y austera» sin afectar a los servicios.