Hombre de carácter, con mucha experiencia en gestión económica y financiera en administraciones públicas, profesor y hoy concejal en Toledo, Juan Alfonso Ruiz Molina es el nombre que encabeza las quinielas para hacerse cargo de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas.
Hombre clave en el equipo de Milagros Tolón en el Ayuntamiento de Toledo, el concejal Juan Alfonso Ruiz Molina durará poco en el Consistorio de la capital si se cumplen los pronósticos que, con mucha probabilidad, le sitúan al frente de la Consejería de Hacienda del Gobierno de Castilla-La Mancha que va a presidir Emiliano García-Page.
Fuentes cercanas al líder socialista han asegurado a encastillalamancha.es que es la primera opción y la más probable, pero también que no está definitivamente cerrado. Lo que sí parece claro es que Page fusionará Hacienda y Administraciones Públicas en la misma Consejería.
De confirmarse el nombramiento que está en boca de todos los bien informados en la cúpula socialista, el de Ruiz Molina, sería así una de las piezas claves del futuro Ejecutivo. Su experiencia en gestión económica y financiera, su conocimiento del Sescam, máquina de gasto más importante de la Junta y su carácter de hombre difícilmente manejable hicieron que su nombre encabezara desde el principio cualquier quiniela para la Consejería de Hacienda, una de las áreas más delicadas del Gobierno y una de las que más preocupa al futuro presidente.
LA AGENDA: DEUDA, EL «MARRÓN» DE LOS INTERINOS Y EL ACUERDO CON PODEMOS
Necesitará poner en práctica todos sus conocimientos, experiencias y habilidades. Y es que el próximo consejero de Hacienda y Administraciones Públicas tendrá que lidiar con una deuda financiera de más de 12.600 millones de euros, un presupuesto que apenas supera los 5.000 millones de ingresos y un acuerdo de investidura PSOE-Podemos lleno de compromisos sociales y, por tanto, de gasto público, entre otros un plan para combatir la pobreza que se aplicaría desde 2016 y cuyas líneas de ayuda tendrán que sumar 500 millones de euros.
Y, de propina, el caos creado con el despido de cientos de interinos de manera «ilegal», según sentenció el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha. Los empleados públicos de la Junta fueron de los más castigados por los recortes y esperan las medidas del nuevo Gobierno con gran expectativa, que será frustración inmediata si no se da respuesta rápida a algunas de sus demandas.
DE CONCEJAL A GERENTE DEL SESCAM Y RESPONSABLE DE ASUNTOS ECONÓMICOS EN DEFENSA
Juan Alfonso Ruiz Molina tiene 53 años, es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales, funcionario del Cuerpo Superior de la Junta y profesor de Economía Financiera en la Universidad de Castilla-La Mancha. Su hoja de servicios como responsable de finanzas públicas en diversos sectores, incluido el Estado, es muy amplia y ha resultado definitiva para su elección. Ruiz Molina ha sido director general de Gestión Económica e Infraestructuras del Sescam, director general de Asuntos Económicos del Ministerio de Defensa, vicepresidente de la empresa pública Ingeniería y Servicios Aeroespaciales (INSA), subdirector general de Planificación del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial. director gerente del Sescam y ex concejal en Toledo entre 1999 y 2003. Considerado un hombre de José Bono, José María Barreda lo destituyó en el Sescam a finales de 2009, momento en el que se empezó a descontrolar el gasto de este departamento en la región y que a mediados de 2011 acumulaba 150.000 facturas sin pagar.
Es el nombre más claro del futuro Gobierno en las quinielas socialistas, junto con el José Luis Martínez Guijarro como posible vicepresidente, tal y como les ha adelantado encastillalamancha.es.