El exconsejero de Sanidad de Castilla-La Mancha Roberto Sabrido ha cuestionado hoy la gestión sanitaria que está haciendo el Ejecutivo autonómico, que parece orientada a hacer rentable a los modelos de gestión de comunidades autónomas limítrofes como Madrid o Valencia, que necesitan negocios externos.
Sabrido ha dicho: «tenemos una situación estratégica que nos acerca y nos aleja, en este caso nos rodean comunidades como la de Madrid con un desarrollo hospitalario de otra manera, que necesita negocios externos para ser rentable».
«Esos negocios externos le pueden venir de otras comunidades autónomas cercanas, en la medida en la que se restrinjan recursos en un sitio evidentemente se tienen que desplazar las personas al otro», ha indicado Sabrido.
Según ha argumentado Sabrido: «nosotros no decidimos cuando ponernos enfermos, si no me dan aquí la asistencia tendré que ir a otro lado, y en ese otro lado a lo mejor hay una concesión privada a la que le viene muy bien que se desplace gente de Castilla-La Mancha».
«Curiosamente las comunidades que nos rodean son las campeonas en ese tema, una Madrid y otra Valencia», ha apuntado el exconsejero de Sanidad, quien ha añadido: «luego por lo tanto, yo a veces pienso que evidentemente los madrileños que nos han puesto a gestionar la sanidad de Castilla-La Mancha lo están haciendo muy bien para Madrid pero no para Castilla-La Mancha».
Ha hecho estas reflexiones esta tarde, a preguntas de los periodistas sobre las críticas del actual Gobierno regional y del PP a la gestión del anterior Ejecutivo autonómico, al que acusan de haber hecho obras faraónicas como el nuevo hospital de Toledo.
«No son obras faraónicas, están en la media de lo que marca la ciencia sanitaria en la gestión que tenía que tener esta comunidad autónoma, pero los modelos de gestión público-privada, más privada que pública necesitan de clientela y la clientela hay que sacarla», ha reiterado Sabrido.
Sabrido ha puntualizado: «no hicimos nada sobredimensionado, no hicimos nada faraónico, hicimos lo que se requería para tener en esta comunidad autónoma al menos lo mismo que en otra comunidad autónoma y evitar un auténtico turismo sanitario donde más de 16.000 personas se tenían que desplazar diariamente a otras comunidades autónomas a recibir asistencia sanitaria, cuando cogimos las transferencias».
Ha apostillado: «despilfarro ninguno, dimensiones las justas y dotarnos sin volvernos locos de cosas imprescindibles que la ciencia médica, la ciencia sanitaria dice que tenemos masa crítica suficiente para disponer de esos servicios en Castilla-La Mancha»
«Por qué ahora, en base a este ahorro, dicen que era una obra faraónica», se ha preguntado en relación al nuevo hospital de Toledo Sabrido, quien se ha mostrado dispuesto a debatirlo.
«Mientras no me lo demuestren, son palabras», ha advertido Sabrido, que ha asegurado: «yo les puedo demostrar como múltiples argumentos que no lo es, incluso que tenemos menos habitaciones que algunos hospitales en comunidades del Partido Popular que ya están funcionando».