Emiliano García-Page, en las puertas del Teatro Palenque, en Talavera, justo antes de comenzar el acto institucional del Día de Castilla-La Mancha.
«Estamos en período de descuento y voy a trabajar, y mucho, para que éste sea el último año de fiesta de Castilla-La Mancha con Cospedal. Porque llevamos tres años aterradores en la región, me acuerdo cuando los días de la fiesta de CLM era cruzarse con la gente, pero hoy Talavera es una ciudad sitiada, no se puede acercar nadie, yo estoy con la gente que dice que ya está bien».
Son declaraciones de Emiliano García-Page, secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, justo antes de entrar al Teatro Palenque, en Talavera, donde tiene lugar el acto institucional del Día de la Región.
Page ha insistido en que «me voy a dejar la piel» en cambiar el Gobierno de CLM el próximo año. Y sobre la presencia mínima de su partido en el acto (él, junto al portavoz del PSOE en Talavera, José Gutiérrez; y la diputada regional Raquel Vetas, también talaverana), como las ausencias de IU y los sindicatos, Page ha recalcado que «cada día que pasa es más difícil que alguien se quiera acercar a Cospedal, de hecho yo estoy invitado como alcalde y no como secretario general del PSOE. Porque se siembra el odio y el enfrentamiento, pero les digo que en Castilla-La Mancha hay esperanza, muchos retrocesos, recortes… Cospedal es incapaz de pasear por las calles de Talavera como la sucede en cualquier lugar de la región, y además quiere inventarse el resultado electoral de espaldas a toda la ciudadanía», en referencia a la reforma del Estatuto de Autonomía que implicará la reducción a casi la mitad el número de diputados en las Cortes regionales la próxoma legislatura».