La irrupción de un grupo de manifestantes con pancartas contra la subida del 9 por ciento del IBI en el pleno municipal de Puertollano (Ciudad Real) celebrado en la tarde de ayer jueves y los momentos de tensión y confusión tumultuaria generados durante la expulsión del salón de plenos de uno de ellos obligó a la alcaldesa, Isabel Rodríguez, a suspender la sesión durante casi media hora.
Los hechos se han producido sobre las 17.48 horas, cuando entraron al salón un grupo de personas que previamente habían participado en una cacerolada convocada por la Plataforma Ciudadana por el Futuro de Puertollano para protestar por la subida de un 9 por ciento en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para el ejercicio 2020 aprobada en el pleno municipal del pasado mes de octubre con los votos de PSOE e IU.
En ese momento, y ante las increpaciones de uno de ellos, la alcaldesa, tras varios apercibimientos, pidió a los efectivos de la Policía Local que expulsasen al manifestante y a los organizadores de la protesta que «actuasen con la responsabilidad y el decoro debido al acto y a la Corporación».
Fue entonces cuando se produjeron momentos de tensión y confusión entre los asistentes a la sesión plenaria, que obligaron a la regidora a suspender el pleno hasta que las fuerzas del orden mediaran.
Una vez despejado el recinto, sobre las 18.15 horas, y entre un importante dispositivo policial, se reanudó sin más incidentes el pleno, al que pudieron asistir con normalidad los ciudadanos que lo querían. En esta sesión se debatieron y aprobaron, con los votos a favor de PSOE e IU, entre otros asuntos, los Presupuestos municipales para el ejercicio 2020, que ascienden a 45.143.480 euros, dos menos que en el ejercicio anterior.
Cacerolada en el exterior
Previamente, unas 200 personas se concentraron frente al Ayuntamiento de Puertollano en la cacerolada convocada por la Plataforma Ciudadana por el Futuro de Puertollano.
La concentración fue convocada entre las 17 y 17.30 horas, momento en el cual parte de los manifestantes accedió a las dependencias municipales para asistir al pleno.
El objetivo de la protesta, según los organizadores, era expresar la «indignación» de una subida que a su juicio es «abusiva, injusta, desproporcionada e indiscriminada» y fruto de la «mala gestión» en anteriores legislaturas.
La concentración de este jueves vino precedida por una campaña de recogida presencial de firmas entre la ciudadanía que proseguirá en las próximas semanas y que hasta el momento ha recabado más de 3.500 apoyos. La plataforma no descarta nuevas medidas, y de hecho ha anunciado su intención de presentar alegaciones al acuerdo plenario.
Se trata del cuarto acto de protesta registrado en Puertollano por la subida del IBI tras dos concentraciones de desigual seguimiento que tuvieron lugar los pasados días 30 de octubre y 2 de noviembre convocadas de manera anónima en redes sociales y sin comunicación previa a la Subdelegación del Gobierno, y una tercera el pasado 15 de noviembre que congregó a unas 400 personas.
Indignación en Ciudadanos
En otro momento posterior, una vez recuperado el debate, el Grupo Municipal Ciudadanos al completo abandonó, visiblemente indignado, el pleno de la Corporación después de que el portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida, Jesús Manchón, recriminase al portavoz de la formación naranja, Rafael López, que haya cedido su liberación como edil porque gana más en su trabajo, «donde se dedica a leer el periódico».
El incidente se produjo durante el debate de los presupuestos municipales para el ejercicio de 2020, en el que, en un primer momento, Rafael López afeó a Manchón que haya cambiado su postura, pactando con el PSOE, asumiendo tareas de gobierno y apoyando los presupuestos «por interés».
En su turno de réplica, Manchón respondió a Rafael López acusándole de ceder su liberación a otro compañero de grupo porque le resulta más ventajoso seguir en su trabajo, «donde se dedica leer el periódico». Antes, en otro punto, aludió a López como «sinvergüenza», ha lamentado Ciudadanos.
En este punto, y tras dar un golpe en la mesa visiblemente indignado, López, acompañado por los otros tres concejales de Ciudadanos, abandonó el pleno mientras el concejal naranja, Alejandro Llanos, le espetaba a Manchón: «¡Vendido!».
Entonces tuvo que mediar la alcaldesa Isabel Rodríguez, que lamentó la situación y pidió al concejal de Izquierda Unida que no aludiera a cuestiones personales y que retirase sus palabras, a lo que accedió el edil, y pidió al secretario del Ayuntamiento que no incluya en el acta las declaraciones de Manchón. Este, por su parte, pidió que se retire asimismo del acta la acusación de «vendido» proferida por Alejandro Llanos y pidió disculpas, no sin advertir que no tolerará que nadie cuestione su sueldo en relación con el trabajo que lleva a cabo en el Consistorio.