El secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Vaquero, ha comparecido ante los medios para valorar la jornada socialista, en la que se celebran simultáneamente dos congresos provinciales, Toledo y Albacete.
En este sentido, Vaquero explicó que la receta que se lleva a las organizaciones provinciales desde la dirección regional que se eligió hace una semana se basa en tres puntos: «trabajo, cercanía y diálogo; tanto internamente en el partido como con la sociedadad. Hay que trabajar mucho con los compañeros del partido, hay que visitar las agrupaciones y estar pendientes de todas las circunstancias que atañen a los compañeros, tanto personales como políticas».
Acababa de explicar así Vaquero el recetario que ha hecho fuerte al PSOE toledano, incluso en momentos de derrota, pero también el que les ha llevado a sacar adelante el liderazgo de Emiliano García-Page, cuya figura aclamaron los socialistas de toda la región cuando siete días atrás lo eligieron secretario general regional.
Además, Fernández Vaquero anunció que se quiere dialogar con el PP los asuntos vitales para los ciudadanos de Castilla-La Mancha. En este sentido, ofreció acuerdos dirigidos a la creación de empleo y también a la defensa de los intereses de Castilla-La Mancha en materia de agua. «Y tener una sola voz PP y PSOE, como ocurre en Aragón, Murcia o Valencia, donde el Partido Socialista y el Partido Popular defienden la misma política del agua en sus comunidades».
También pidió Vaquero reducir la intensidad de los recortes para no acabar mermando las prestaciones sociales o santiarias que los castellano-manchegos tienen derecho a recibir en la misma medida que el resto de los españoles.
En este sentido pidió un giro en la política de la presidenta, María Dolores de Cospedal, a quien definió como «la Merkel manchega». «Hay que reflexionar sobre el déficit», agregó, al tiempo que insistió en que hay acompañar las políticas de austeridad de la solicitud al Estado de una ayuda compensatoria a Castilla-La Mancha, ya que la prestación de servicios en esta comunidad es más cara que en otras más pobladas, más desarrolladas y de menor extensión geográfica.
«Como hicimos en el Estatuto de Autonomía», prosiguio y acabó pidiendo a la presidenta que «tenga la cabeza en Castilla-La Mancha, aunque no tenga siempre el cuerpo, porque tiene que viajar mucho».
Al respecto de la deuda citó al presidente extremeño, José Antonio Monago, del PP, quien ha comparado el déficit con el sobrepreso. Citando las pabras del dirigente «popular», Vaquero manifestó que «el déficit, como el sobrepeso, hay que corregirlo, pero no puedes adelgazar 40 kilos en una semana, porque entonces matas al paciente».
«No venimos a topar contra un muro, ni venimos al enfretamiento, sino a abrir una vía de diálogo», dijo el número dos de los socialistas castellano-manchegos, que hoy se ha despedido de su larga etapa como dirigente provincial del partido en Toledo.
Agregó que sí estarán enfrente de decisiones que supongan recortar derechos, como la reforma laboral aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy.