Desde el Sindicato de Enfermería (Satse) quieren revertir la situación de agresiones a sanitarios que en Castilla-La Mancha ha alcanzado la cifra de 2.000 en solo cinco años. Un elevado número que justifica la campaña que arranca el sindicato a nivel nacional con el objetivo de «informar y sensibilizar para acabar con un problema que afecta especialmente a los profesionales de enfermería», indica un comunicado de prensa emitido por Satse.
Según los datos que aportan, ocho de casa diez enfermeros han sufrido a lo largo de su trayectoria profesional algún tipo de agresión física o verbal, tales como golpes, empujones, insultos, amenazas, vejaciones…
Por este motivo, la campaña «#StopAgresiones. Nada justifica una agresión» quiere poner el foco en este problema y reclamar mediante el material informativo (carteles, pegatinas, etc.), vídeos y las redes sociales una mayor implicación por parte de las administraciones, de los ciudadanos y también de los propios profesionales.
La nueva campaña de Satse contempla la distribución de distinto material informativo en todos los centros sanitarios de Castilla-La Mancha. También se difundirá a través de vídeos, redes sociales, medios on line y cuñas en radio.
Todas las acciones previstas buscan sensibilizar a los ciudadanos sobre la necesidad de que se mantenga, en todo momento, una relación de respeto y confianza entre profesionales, pacientes y familiares. Asimismo, se recordará que los problemas y carencias que pueden llegar a sufrir pacientes y familiares no son responsabilidad del profesional, el cual también los sufre y hace todo lo posible para que no se vea afectada la calidad de la atención sanitaria.
Según el secretario general del sindicato Satse en la región, Juan Francisco Ruiz López, este problema permanece «invisible» en muchos de los casos y sigue siendo «la gran asignatura pendiente».