El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha autorizado una inversión superior a los 75 millones de euros para el suministro de reactivos, material fungible y equipamiento de laboratorios de análisis clínicos del Servicio regional de Salud (Sescam).
Así lo ha avanzado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, en la habitual rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos alcanzados este martes en el Consejo de Gobierno.
Fernández Sanz ha explicado que la inversión, a cinco años, irá destinada a la renovación tecnológica para la realización de determinaciones analíticas del laboratorio de análisis clínicos y a diverso equipamiento auxiliar de las Gerencias de Atención Integrada de Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo.
El consejero ha señalado que este equipamiento permitirá hacer «más pruebas y mejores diagnósticos, de forma más rápida y con mayor seguridad», lo que, a su vez, se traducirá en una menor externalización, que podría reducirse al 3 por 100, cuando en la actualidad está entre el 5 y el 6 por 100.
Ha precisado que en los laboratorios de Castilla-La Mancha se atiende a unos tres millones de personas y que cada ciudadano pasa una vez y media al año por el laboratorio, lo que supone 52 millones de determinaciones, cada una de las cuales tiene un coste aproximado de 0,6 euros.
Y ha agregado que no se trata solo de modernizar, sino también de homogeneizar todos los laboratorios de la región en lo que se refiere a «calidad y rapidez de diagnóstico».
El titular de Sanidad ha recordado que el pasado año el Consejo de Gobierno aprobó destinar 27 millones de euros para el mismo fin en otras seis gerencias de menor tamaño: las de Villarrobledo, Manzanares, Valdepeñas, Almansa, Puertollano y Hellín.
Y ha resaltado que quedarían pendientes las de Albacete, Talavera y Alcázar de San Juan, donde la renovación tecnológica llegará «a continuación», con una inversión total para el proyecto completo que ascenderá a 130 millones de euros, ha matizado.
Por otro lado, Fernández Sanz ha informado de los resultados de la unidad de PET-TAC móvil, que en un año de funcionamiento permite realizar unas 8.000 exploraciones y gracias a la cual se han evitado, desde su puesta en funcionamiento, más de un millón de kilómetros en desplazamiento, así como una pérdida de tiempo en trayectos de un año, dos meses y 20 días y unos gastos de 200.000 euros.
Se trata de un servicio que comenzó a realizar pruebas diagnósticas en el Hospital Universitario de Guadalajara en el mes de junio de 2017 y al que tres meses después se sumó Cuenca, mientras que a partir de abril de 2019 se amplió a los hospitales de Alcázar de San Juan, Toledo, Talavera y Albacete.
El consejero ha especificado que los pacientes que se han sometido a una prueba de medicina nuclear con el PET-TC móvil del Sescam otorgan un sobresaliente a la asistencia recibida, según reflejan las más de 1.200 encuestas de satisfacción realizadas.
Ha hecho hincapié en que la calificación de los pacientes es de 9,12 sobre 10 y en que la mayoría de ellos destaca la comodidad que supone no tener que desplazarse a Ciudad Real o a Madrid para realizarse esta prueba.
Además, el titular de Sanidad ha valorado la Red de Medicina Nuclear (NumisCam) con la que cuenta que Castilla-La Mancha, un sistema que permite a los profesionales leer una prueba desde cualquier punto de la región y por el que, según Fernández Sanz, se están interesando otras comunidades autónomas.