En Castilla-La Mancha hay alrededor de 50.000 pacientes con demencia. En España son más de un millón, apareciendo 60.000 nuevos casos cada año. Estos datos fueron expuestos este fin de semana en Toledo durante la reunión de formación continuada en Cardiología «Cardioforo», un encuentro que se viene celebrando todos los años desde 1998 y que congrega a dos centenares de cardiólogos.
Los profesionales reunidos pudieron conocer un estudio recientemente publicado que demuestra que un buen tratamiento de la hipertensión arterial reduce la aparición de la demencia, especialmente en sus fases más iniciales. «En este contexto, es extraordinariamente relevante el hallazgo de que un control más estricto de la presión arterial, en comparación con el control habitual, consigue reducir la aparición de nuevos casos de demencia, dado que abre una nueva puerta a la prevención de esta importante e invalidante patología», pone de manifiesto en una nota de prensa Luis Rodríguez Padial, cardiólogo del Complejo Hospitalario de Toledo.
Afirma que se estima que la adquisición de hábitos de vida saludables, como la dieta sana, el ejercicio físico, mantener un colesterol en sangre bajo, evitar el tabaco… puede prevenir hasta el 40 por 100 de los casos de demencia. «A esto puede añadirse en los pacientes hipertensos este nuevo y relevante hallazgo que hace hincapié en la importancia de un control correcto de la presión arterial».
Considera curioso comprobar cómo la prevención de la demencia sigue las mismas pautas que la prevención de las enfermedades cardiovasculares. «De hecho, muchas demencias tienen una causa vascular o, sobre todo al inicio, un cierto componente de patología vascular que contribuye a poner en marcha el deterioro mental. Posteriormente, parece que se añaden distintos mecanismos que, espoleados por la alteración vascular, contribuyen a incrementar el deterioro mental progresivo».
Además de la discapacidad que representa, las demencias son causa frecuente de mortalidad. En 2017 provocaron la muerte de más de 700 castellano-manchegos. Se estima que el creciente envejecimiento de la población incrementará los casos de demencia, dado que aumentan con la edad: tienen demencia el 5 por 100 de los mayores de 60 años, el 20 por 100 de los mayores de 80 años y el 30 por 100 de los que tienen más de 90 años de edad. Por ello, «es esencial buscar formas de prevenir esta patología tan invalidante y con tanta relevancia social».