El Sescam ha editado la guía «Adecuación Farmacoterapéutica» con más de un centenar de recomendaciones sobre el uso racional de medicamentos y está dirigida principalmente, a médicos de atención primaria.
El documento, que ya se encuentra disponible en la página web del Sescam, aborda temas y patologías como la prevención de caídas, el uso prudente de antibióticos y opioides, el manejo de los corticoides en la EPOC y el uso de sulfonilureas en el manejo de la diabetes, según ha destacado en un comunicado la Consejería de Sanidad.
Se trata de un documento con 113 recomendaciones, consensuado en el Comité editorial del boletín farmacoterapéutico del Sescam, que promovió la constitución de un grupo de trabajo para elaborar la guía, en el que han trabajado ocho farmacéuticos de atención primaria y tres médicos especialistas en Medicina familiar y comunitaria y en Medicina preventiva y de salud pública.
Un manual completo realizado por Sescam
La Consejería ha informado de que la publicación cuenta con 230 referencias bibliográficas y un formato didáctico «que pretende ser una herramienta útil» de consulta de recomendaciones sobre la medicación general del paciente y que reflejan criterios de «efectividad, seguridad y eficiencia«.
Así, el documento refleja que un medicamento prescrito se considera adecuado cuando existen claras evidencias para su empleo en esa indicación, se tolera bien por el paciente y es efectivo; por lo que a partir de este planteamiento, los profesionales señalan recomendaciones sobre el plan terapéutico, a partir de un correcto diagnóstico y las circunstancias concretas del paciente.
Además, la guía contempla si existen alternativas de terapia no farmacológica (dieta, ejercicio físico, ortesis o psicoterapia) y cuál sería el medicamento más eficaz y seguro, así como las revisiones periódicas de los planes terapéuticos según los objetivos marcados.
Por último, la guía dedica otros tres capítulos a la necesidad de gastroprotección y uso de inhibidores de la bomba de protones, sobre la utilización prudente de antipsicóticos, y el uso de antidepresivos y psicoestimulantes en el contexto de síntomas graves y tratamientos integrales.