«Preocupación elevada». Así ha definido la situación el ministro de Sanidad, Salvador Illa, quien ha insistido en que plan de Navidad sigue siendo el mismo: «No moverse y quedarse en casa».
Aún así, las medidas no se han endurecido tras al Comité Interterritorial de Salud, aunque ha instado a las comunidades autónomas a aumentar las medidas (toque de queda, cierre perimetral, límite del número de personas en reuniones) en función de su situación epidemiológica.
«Se mantiene el plan de navidad que tomamos conjuntamente. Se resume en que en navidad nos quedamos en casa», ha expresado el ministro.
«Aquellas comunidades, en base a su situación epidemiológica, podrán reducir el número de comensales, podrán restringir la movilidad y podrán ser más estrictos en la movilidad nocturna de nochebuena y nochevieja, siempre en el marco de las competencias que confiere el estado de alarma», ha recordado Illá.
Por eso ha insistido que se «mantiene el plan de Navidad, pero las comunidades autónomas pueden ser más estrictas», a la vez que ha informado de que habrá que ir valorando la situación día a día por si hay nuevas decisiones que tomar.
Ha defendido el marco de medidas que se tomó en octubre, lo que ha permitido una bajada de la incidencia «rápida y eficiente», pero ha recalcado que se «han de tomar medidas de forma urgente» ante la nueva escalada de casos. «No hay que desperdiciar ese esfuerzo», ha remarcado Illa.