El Gobierno de Castilla-La Macha quiere ir «más deprisa» con la eliminación de la obligatoriedad del uso de las mascarillas en espacios interiores, aunque sigue abogando por alcanzar «consensos» entre Gobierno de España y comunidades autónomas para establecer unos «plazos claros» en la desescalada de esta medida.
Así lo ha manifestado la portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, en la rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno en el Palacio de Fuensalida, en Toledo, justo en el mismo espacio donde está desarrollado la reunión del Consejo Interterritorial de Salud, organismo en el que se va a tomar esta decisión.
«Podríamos ir más deprisa, pero nuestra prioridad es que se tome por consenso y por dar un escenario solvente en los próximos días«, ha explicado Fernández a preguntas de los periodistas sobre la postura castellanomanchega de cara a esa reunión.
Atención: la retirada de las mascarillas se podría retrasar hasta después de Semana Santa
Los técnicos de Sanidad piden retrasarlo
Y es que ayer se conoció que en el borrador que envió el Gobierno a las comunidades autónomas, donde, tras desaconsejarlo los técnicos, se indicaba que sería conveniente esperar a la conclusión de la Semana Santa para eliminar la mascarilla en interiores.
Además, la también consejera de Igualdad ha recordado que la eliminación de las mascarillas tendrá algunas excepciones para hacer «una desescalada con sentido común». Así, y «durante un tiempo», habrá que seguir con las mascarillas «en el transporte público y en las residencias».
«Ese es el planteamiento que vamos a llevar y que se hada con un calendario pactado con las comunidades autónomas», ha concluido la portavoz.