Entusiasmo y sonrisas en los responsables autonómicos y municipales que con su visita a la zona han dado hoy por reiniciadas las obras del Hospital de Toledo, una infraestructura sanitaria vital para al menos la mitad de los ciudadanos de la provincia.
El consejero de Sanidad hace algunas obsevaciones a las autoridades de las obras del hospital.
“Un día emocionante y lleno de futuro”, dijo el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, que no ocultaba su entusiasmo al ser responsable de retomar las obras de un hospital que urge a la ciudad, a la provincia y a la región.
Con el pronóstico de que el nuevo hospital de Toledo será un “referente más allá” de Castilla-La Mancha en algunos aspectos, el responsable de la sanidad regional explicó algunos detalles del nuevo proyecto, que tiene 15.000 cuadrados más en la zona de hospitalización que el que recortó su predecesor, Ignacio Echaniz, consejero de Sanidad en el Gobierno de María Dolores de Cospedal.
Habitaciones individuales para Maternidad, entradas diferencias para Consultas Externas, Hospitalización y Urgencias, concentración de Traumatología en este hospital (ahora repartida en varios centros de la ciudad) y 800 camas, además de 56 para UCI de adultos y 14 para UCI pediátrica, son las principales características del proyecto que ha destacado Fernández Sanz.
El consejero también se ha referido a que tras estudiar meses el proyecto anterior ha preocupado mucho mejorar la funcionalidad del edificio, algo que da por conseguido en el nuevo proyecto. Tras agradecer la disposición y colaboración de la empresa en esta tarea, ha citado como ejemplo del avance en aspectos de funcionalidad que se agrupan en la misma vertical todos los servicios que tiene que ver con Urgencias y los pacientes calificados como “críticos”. En este sentido, en el ala de Urgencias se encuentran también Obstetricia, la UCI de neonatos, la UCI adultos y el bloque quirúrgico. A la derecha de esta zona hospitalaria se van a situar áreas como Radiología, Medicina Nuclear, además de Laboratorios, con su propia entrada particular. En esa zona críticos y servicios de apoyo
30 meses es el plazo de las obras de la primera fase del proyecto, que irá paralela a la licitación de equipos, un trámite que Sanidad espera poder hacer a finales de este año.