La piedra que recuerda al agente de la BRIF de La Iglesuela fallecido en 2005.
“A Javi, por lo que nos diste. Tus amigos”. La frase grabada en piedra y recuperada en una imagen compartida en Twitter para seguir rindiendo homenaje al bombero forestal fallecido 11 años atrás.
Encima de la foto un breve texto: “Hoy recordamos compañero Javier Tirado #BomberoForestal .@brif_iglesuela nos dejó hace 11años accidente #IFCasavieja”. Un escueto pero emotivo tuit colgado el 6 de agosto en el perfil oficial de la Asociación de Trabajadores de las BRIF (@AT_Brif) recordaba a Javier Tirado Rodríguez, de 29 años, natural de Sevilla, que formaba parte de una cuadrilla helitransportada de la Brigada de Refuerzo contra Incendios Forestales (BRIF) de La Iglesuela, en la provincia de Toledo, fallecido el 6 de agosto de 2005 cuando participaba en las tareas de extinción de un incendio en Casavieja (Ávila).
Según las noticias del suceso, fue golpeado bruscamente por las rocas que se desprendieron de una ladera y murió poco después de que los servicios de emergencia consiguieran reanimarle.
Ese mismo día, 6 de agosto de 2005, moría también el piloto de la avioneta que trabajaba en las labores de extinción de un incendio forestal en la localidad orensana de Medeiros. El piloto falleció al estrellarse el aparato cuando sobrevolaba la zona.
EL VERANO TRÁGICO DE LOS 11 MUERTOS EN LA RIBA DE SAELICES
Fue un verano fatídico. Unas semanas antes, el 18 de julio habían fallecido los 11 miembros de un retén que participaba en la extinción del incendio de la Riba de Saelices, declarado el 16 de julio de 2005 y que arrasó más de 10.000 hectáreas de la provincia de Guadalajara, una buena parte en el Parque Natural del Alto Tajo.
La causa del fatídico fuego fueron las chispas procedentes de una barbacoa que hicieron en el monte un grupo de excursionistas cerca la Cueva de Casares y pese a ser advertidos contra ello por un guía.
Finalmente y tras un largo y toruoso proceso judicial, la Audiencia Provincial de Guadalajara ha condenado a dos años de cárcel a Marcelino H., uno de los tres acusados de provocar el incendio de 2005 en la Riba de Saelices.