«Esos locos bajitos que se incorporan con los ojos abiertos de par en par…». Esta frase de Joan Manuel Serrat define a la perfección cómo estaban los niños de los colegios Tirso de Molina, de Argés; y Tomas Romojaro, de Fuensalida, en el salón de Plenos de la Diputación de Toledo. Probablemente sea la primera vez que acuden a un sitio como este. Aquí las paredes no están adornadas con dibujos ni pizarras, aun así han conseguido llenar la habitación con la frescura que les caracteriza.
Se cumplen 25 años de la convención de los derechos de los niños y Unicef y la institución provincial han organizado el quinto foro por la participación infantil.
SI NO PUEDES VER LAS FOTOS, PINCHA AQUÍ
Aparte del vicepresidente de la Diputación, Emilio Bravo, la mesa ha estado presidida por José María Calvo, presidente de Unicef Castilla-La Mancha; Jesús Guerrero, alcalde de Argés y responsable del área de Sanidad y Servicios Sociales de la Diputación; y Mariano Alonso, alcalde de Fuensalida.
Bravo ha explicado que con esta convención quieren «acercar las instituciones a los niños para tener en cuenta sus propuestas». Además, les ha aconsejado «que estudien y se preparen para el futuro».
Calvo ha señalado que «uno de cada cuatro niños vive en riesgo de pobreza» y que «sólo se destina un 1,4 por 100 del PIB en políticas de protección a la infancia».
LA MAYORÍA DE NIÑOS Y NIÑAS HAN PEDIDO MEJORAS EN LA SANIDAD Y EDUCACIÓN
Después los niños y niñas, de 11 y 12 años, han leído en voz alta las propuestas de cambio que habían preparado. La mayoría han pedido mejoras en la sanidad y educación pública. Ana solicita a los políticos que «dejen a un lado sus diferencias ideológicas y trabajen en equipo». Y Alba considera que se debe «ayudar a los niños pobres que no pueden pagarse los medicamentos».
Siguiendo en esta línea Víctor, un poco tímido, ha explicado que «en la salud no hay que distinguir entre ricos, pobres o razas porque todos tenemos derecho a una sanidad pública». Paola, que ha cogido el micrófono decidida, tiene claro que «no hay que recortar en educación porque todos tenemos derecho a una educación igualitaria». Samuel considera que la pobreza separa a las familias porque «por culpa de la crisis cada padre trabaja en un sitio y no pueden ver a sus hijos». Y ha concluido Sara señalando que los niños «tienen derecho a estar protegidos contra los malos tratos».
Después, Guerrero ha pedido a los niños que colaboren «y cuiden las aulas de los colegios». Alonso también ha hecho una petición a los pequeños, «quiero que nos digáis qué mejoras podemos hacer en el pueblo». Y, aunque al principio no había ninguna mano levantada, no han tardado en hacerse oír. Inés, alumna del colegio de Argés, le ha pedido que «arregle las puertas de las aulas que no cierran porque podría entrar cualquiera». Roberto se ha quejado de que en algunos parques de Argés «los columpios están rotos».
Y Tomás, alumno del colegio de Fuensalida, le ha pedido a su alcalde que «arregle la piscina climatizada del pueblo». Ante tales propuestas los alcaldes, de ambas localidades, se han comprometido a llevar a cabo todas las mejoras que los niños les han pedido.
Calvo ha puesto el broche final al foro señalando que aunque en estos 25 años se han conseguido dar grandes pasos «no podemos parar». Ha señalado que en la provincia de Toledo «sigue aumentando el número de familias que viven por encima del umbral de la pobreza» y ha pedido a los alcaldes de Argés y Fuensalida que «cada año se haga un foro donde se hable con los niños».