10 meses secuestrado en Siria y un infierno que se ha atrevido a contar, en parte. Es Ángel Sastre, vive en Guadalajara aunque es extremeño, y es uno de los tres periodistas españoles que fueron liberados el sábado 7 y que regresaron un día después.
Ángel Sastre, en la imagen que tiene en su cuenta de Twitter.
«Después de 10 meses #Syria uno se acostumbra pronto a la libertad…».
Fueron las primeras palabras que escribió el domingo 8 de mayo, el mismo día que llegó a España 24 horas después de ser liberado, en su cuenta de Twitter Ángel Sastre, el periodista extremeno que vive en Guadalajara y que ha estado durante 10 meses secuestrado en Siria junto a los también periodistas Antonio Pampliega y José Manuel López.
A partir de ese momento, Sastre es el único de los tres que ha hablado con los medios de comunicación escritos, televisivos y radiofónicos. Por ejemplo en El Español dijo que «la idea de que me vendiesen al Estado Islámico me aterraba»; o que «lo peor es el silencio y la incertidumbre. No sabes qué te van a hacer ni cuánto va a durar. Si te van a matar, te van a soltar o te van a vender a otro grupo terrorista».
En Onda Cero recalcó que «hay cosas que nunca se podrán publicar» o que se refugió «en la escritura, cuando terminaba un cuaderno pasaba a otro. Ellos mismos nos los daban. Nos dieron dos libros sobre asuntos religiosos, posteriormente pedimos otros y nos pusieron una televisión».
En El Español recuerda que lo que más extrañó fue a su familia, «la deuda emocional que tengo con ellos no la voy a poder pagar nunca; durante el secuestro piensas más en el daño que les estás causando a ellos que en el tuyo propio».