CCOO ha rechazado el «celo represor» del Gobierno regional, al sancionar a un profesor de Cabanillas del Campo (Guadalajara), por haber dado una charla y entregado una nota a sus alumnos, de 10 años, en la que informaba de los motivos por los que secundaría la huelga general del 29 de febrero. En una nota de prensa, la Federación de Enseñanza de CCOO ha expresado su «repulsa» por la sanción impuesta a este docente, «por explicar a sus alumnos que iba a faltar a clase para secundar una huelga en defensa de la escuela pública».
El sindicato ha considerado que «lo injustificable es el celo represor de la responsable de los servicios periféricos de Educación en Guadalajara».
Según Comisiones Obreras, «el celo represor» de la responsable de los servicios periféricos de la consejería de Educación en la provincia de Guadalajara, Violeta Miguel, «no tiene justificación ninguna».
La ha acusado de ser «la incitadora y responsable de este expediente sancionador y de otras iniciativas igualmente repulsivas que sólo se explican desde motivaciones ideológicas más propias de otras épocas, desde fobias personales inaceptables o desde un penoso afán de agradar a sus jefes».
En este sentido, el secretario general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Castilla-La Mancha, Alfonso Gil, ha comentado que «cuando a los alumnos les explicamos lo que hacemos y las razones por las que lo hacemos, les estamos educando».
Gil ha añadido que «para los docentes, es incluso una obligación ética explicarse ante los alumnos y las familias; y para los alumnos y las familias es un derecho conocer los motivos por los que hacemos huelga: en defensa de la escuela pública, que está en grave peligro».
Asimismo, CCOO ha trasladado su solidaridad y su apoyo al profesor sancionado y ha puesto a su disposición los servicios jurídicos del sindicato.