Varios centenares de personas se han manifestado esta noche en las principales ciudades de Castilla-La Mancha para manifestar su rechazo a la violencia machista y conseguir que se reflexione y se tomen medidas contra este problema.

La consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, ha participado en la manifestación de Ciudad Real, también la alcaldesa, Pilar Zamora, y, por su parte, la diputada nacional del PSOE por Toledo Esther Padilla y la portavoz de Igualdad del grupo parlamentario socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha, Charo García Saco, han estado en la de Toledo, que ha partido desde la plaza de Zocodover con la pancarta «Por las que no están, por las que están y por las que peligran».

Un grito unánime contra la violencia machista

Fernández, en declaraciones a la prensa, ha señalado que la violencia de género interpela a la sociedad en su conjunto y ha añadido que este tipo de concentraciones son una manifestación ciudadana que «hay que acompañar y que hay que impulsar».

«Tenemos que contribuir a que funcionen porque es un clamor popular el que nos dice basta ya de tanto asesinato, tantas violaciones y tanta vejación a las mujeres», ha afirmado la portavoz de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.

Fernández ha indicado que ha participado en la manifestación para «decir lo mismo que dicen aquí todas las personas que están reunidas: basta ya».

El Puente de Alcántara o el torreón de la Cava, en Toledo, de morados

Una de las organizadoras de la movilización de Toledo, Ana Miranda, la señalado que la violencia contra las mujeres por el solo hecho de serlo es un problema estructural y por eso hay tantos casos, y «muchas lo están sufriendo hoy en sus casas», ha lamentado.

«A ver si con la movilización y las reflexiones de hoy se da un paso adelante y se encuentra, no la solución porque eso es imposible, sino conseguir que por lo menos la gente se mueva para que termine la violencia hacia las mujeres», ha deseado.

Manifestación en la capital regional en la que también estuvieron dos concejalas socialistas, Ana Belén Abellán y Mar Álvarez. El Ayuntamiento de Toledo ha iluminado de color morado algunos de sus edificios más emblemáticos, como el Puente de Alcántara o el torreón de la Cava. El Gobierno municipal insiste en «la necesidad de aunar esfuerzos para acabar con la cultura del maltrato, la violencia de género y las violaciones».

La diputada socialista Esther Padilla ha manifestado el apoyo del PSOE a las plataformas y colectivos feministas y su compromiso con las políticas de igualdad y de defensa y ampliación de derechos.

Ha recordado que Castilla-La Mancha fue ya pionera con su ley de violencia de género y ahora vuelve a serlo con la nueva ley, y ha abogado por llamar a las cosas por su nombre: «la violencia tiene género y el machismo tiene un partido político que lo ampara, y nosotros, las mujeres y los hombres socialistas vamos a estar siempre en contra de ello», ha afirmado Padilla.

En Albacete, más de 500 personas, según la organización, se han dado cita en la Plaza del Altozano, tras una pancarta con el lema «Unidas somos imparables».

Además se han visto pancartas con frases como «Ni una más» y «Nos queremos vivas».

Los edificios oficiales se han sumado a la movilización y se han iluminado de morado en señal de solidaridad con la protesta.

En Guadalajara, se han concentrado en la Plaza de Santo Domingo este viernes con motivo de la celebración de la ‘Emergencia feminista’ .

Las impulsoras de la iniciativa han propuesto tomar las calles por la noche e iluminarlas con luz violeta para simbolizar la necesidad de desterrar el miedo que sienten las mujeres a diario a salir a la calle por la noche.

Han recordado que en lo que va de año se han cometido 74 feminicidios y asesinatos y más de 1.000 desde que existen registros.

Unas 200 personas en Talavera

Y en Talavera, unas 200 personas se concentraron en la calle San Francisco, donde la exconcejala Carmen Aceituno leyó un manifiesto. A continuación, con una batucada al frente, los participantes salieron de la calle San Francisco y llegaron a la plaza del Laurel, en los jardines del Prado. En uno de sus árboles el ayuntamiento había colocado varias guirnaldas de luces de color violeta como gesto de apoyo. Y se escucharon gritos como «vivas las queremos» o «ni una menos».

Marcha que encabazaba una pancarta con el lema «Talavera contra las violencias de género. Asamblea feminista»; y entre los asistente, la portavoz del Gobierno municipal, Flora Bellón; o la concejala socialista Montse Muro.