Castilla-La Mancha abonará a la Comunidad de Madrid 402,89 euros al año por cada paciente del norte de Toledo que reciba atención sanitaria especializada en la región vecina y la incorporación de estos pacientes se realizará en tres fases con el fin de evitar el desbordamiento de los centros madrileños.
Estas son dos de las condiciones que recoge el convenio sanitario que han aprobado los gobiernos de Castilla-La Mancha y de la Comunidad de Madrid, al que ha tenido acceso la Agencia Efe, y que está previsto que se apruebe por los parlamentos de ambas comunidades la próxima semana para remitirlo después al Senado, que dará el visto bueno definitivo.
El documento establece que la cantidad que tendrá que abonar el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) por cada paciente del norte de Toledo que decida recibir atención especializada en la comunidad vecina se establecerá según la cápita media de los hospitales de Aranjuez y Parla.
La cápita asistencial bruta prevista en 2014 en el Hospital del Tajo (Aranjuez) y en el Hospital Infanta Cristina (Parla) por los pacientes atendidos en estos centros hospitalarios asciende a 402,89 euros.
Actualmente, la cápita sanitaria total de Castilla-La Mancha es de 1.200 euros por persona, por lo que los 402,89 euros cubrirán la asistencia especializada y el resto irá dirigido a cubrir los gastos de atención primaria, médico de cabecera, farmacia o medicina superespecializada, que prestará la comunidad castellanomanchega.
En el caso de los pacientes de la provincia de Guadalajara, el Sescam abonará cada proceso según las tarifas contempladas en el Sistema de Información del Fondo de Cohesión (SIFCO), mientras que las tarifas por las prestaciones no contempladas en el mismo serán fijadas por la comisión de seguimiento del convenio y los precios públicos de las dos comunidades autónomas.
Respecto a la incorporación de los pacientes, el convenio fija que se realizará en tres fases en el caso de los pacientes del norte de Toledo con el fin de dotar a los hospitales madrileños de los recursos materiales y personales necesarios para atender a la población de Castilla-La Mancha.
La primera fase consistirá en recabar el número de pacientes de esta zona que voluntariamente quieran ser atendidos en los hospitales de Aranjuez y Parla.
En la segunda fase, que se realizará en el plazo máximo de seis meses desde el inicio de la primera, podrán incorporarse un máximo de 20.000 habitantes de la provincia de Toledo al hospital de Aranjuez y un máximo de 45.000, al de Parla.
La tercera fase contempla que en el plazo máximo de un año desde el inicio de la primera fase, se incorporarán el resto de pacientes.
En el caso de los pacientes de Guadalajara, el convenio opera de forma inmediata, pues se trata de atención superespecializada (neurocirugía, cirugía cardíaca, cirugía pediátrica, neonatología, medicina nuclear y cirugía torácica).
Según el convenio, las partes podrán denunciar el acuerdo mediante notificación por escrito a la otra parte con tres meses de antelación a la fecha en la que se desee que concluya.
Cualquier modificación del contenido que conlleve un incremento del gasto o minoración de ingresos para la Comunidad de Madrid o de Castilla-La Mancha requerirá la autorización de las consejerías de Hacienda de cada región.
La prórroga del convenio, que será de la misma duración (cuatro años), deberá solicitarse con una antelación de tres meses a la fecha prevista para su extinción.
El documento establece que la comisión de seguimiento del convenio se reunirá con carácter ordinario cada seis meses y la presidencia de la misma se ejercerá de manera alternativa cada medio año por parte del titular del centro directivo del que depende el Sescam y del que depende el Servicio Madrileño de Salud, o las personas en quien deleguen.